Valuando las acciones norteamericanas

Darío Epstein

Hagamos el ejercicio de valuar las acciones norteamericanas. Ya son muchas las opiniones que dicen que hay una burbuja y no nos podemos sentar de brazos cruzados viendo pasar lo que podría ser un nuevo crash bursátil, si es que tienen razón.

Tras la última reunión del FOMC de la Reserva Federal de los EE.UU. y la posterior conferencia de Janet Yellen, quedó claro que las tasas de interés podrían incrementarse tan pronto como seis meses después de dar por finalizado el programa de compra de activos (dentro de un año). La tasa de Fed Funds se incrementaría de 0.125% (entre 0 y 0.25% actual) a un promedio de estimaciones de 0.43% para septiembre del año que viene:

ESTIMACIONES FED FUNDS: encuesta de mercado, en puntos porcentuales

ESTIMACIONES-FED-FUNDS

En el mercado de bonos también las expectativas son de tasas de corto y mediano plazo más elevadas. Según las estimaciones del consenso, el rendimiento de los títulos a 10 años se ubicaría por encima del 3% a mediados de este año y hacia febrero de 2015 se estima que ronde 3,4% (hoy se ubican en 2,67%).

ESTIMACIONES TREASURIES A 10 AÑOS: encuesta de mercado, en puntos porcentuales

ESTIMACIONES TREASURIES A 10 AniOS

Es un contexto más desafiante a la hora de valuar un flujo de fondos descontado a valor presente porque la suba de tasas resta valor hoy a las acciones.

Se ha observado una rotación hacia sectores como el financiero, que se beneficiaría con mayores tasas de interés, y otros sectores rezagados. Las empresas de valor y de crecimiento vertiginoso en los últimos meses tuvieron un duro ajuste producto de estas expectativas.

Ahora bien, ¿cuál es la expectativa para las acciones norteamericanas para este año? Según la media de las estimaciones, el índice S&P 500 finalizaría el año ubicándose en torno a 1.960 puntos, lo que representaría una suba mayor a 5% desde los niveles actuales, y en todo el año acumularía 6% de cumplirse este escenario.

Comparado con los retornos obtenidos en años anteriores, el mercado accionario de EE.UU. no muestra una sólida performance. De hecho en lo que va del año, el índice S&P 500 registra un avance de sólo 0,5%, luego de registrar una suba mayor a 25% en 2013.

Si miramos sus ratios de valuación, el índice S&P 500 se muestra relativamente más caro que, por ejemplo, las acciones europeas respecto a sus ganancias. El ratio Price-to-Earning (PE) para el principal índice accionario norteamericano es de 17,9 veces sus ganancias (trailing 12 meses), mientras que el ratio para el índice Euro Stoxx 50 es de 13,8 veces sus ganancias. El FTSE 100 de Reino Unido registra un ratio PE de 11,6 veces sus ganancias y el DAX alemán tiene un ratio de 15,3 veces. Las bolsas de Japón y de México cotizan con un ratio PE mayor que el de las bolsas norteamericanas, lo que las torna relativamente menos atractivas.

ÍNDICE S&P 500: ratio Price-to-Earnings

iNDICE SP500 grafico

Por otra parte, el ratio Price-to-Book-Value (PBV) del S&P 500 es de 2,48 veces, por encima del promedio de sus comparables, que se ubica en torno a 2,2 veces el valor contable. Además, el PBV de las acciones norteamericanas es bastante más elevado que el de las acciones europeas, asiáticas y latinoamericanas. Sólo la bolsa de México registra un PBV superior al de los índices norteamericanos.
Rusia y Ucrania hicieron ruido pero el riesgo geopolítico siempre está presente y ha demostrado ser más una oportunidad de compra que una amenaza seria a la luz de los hechos. La confusión y la volatilidad resultante redefinen expectativas.

INDICES-BURSaTILES-(1)

En síntesis, y tomando simplemente el análisis de ratios y no incorporando la macro, los Fundamentals, a pesar del conflicto en Europa y de los retiros de estímulos por parte de la Fed, las bolsas norteamericanas continúan con su impulso alcista y alcanzarán pronto nuevos máximos. Y posiblemente los superen pronto. A pesar que esperamos pequeñas correcciones en el camino, será otro año para estar invertido en acciones y no vemos una burbuja en las valuaciones para predecir bajas como muchos y hasta prestigiosos administradores de fondos vaticinan.

La baja inflación y el desempleo están llevando a políticas monetarias de largo aliento.  Estas políticas impactan de lleno en el valor de los activos. En la medida que la FED no este convencida que hay una burbuja, seguirán actuando y los activos mantendrán su tendencia.