Brasil: no me digas qué se siente

Muchos inversores se preguntan últimamente qué tan riesgoso fue invertir en bonos y acciones de Brasil y si conviene seguir invertido, a la espera de un rebote, o mandar a pérdida esas posiciones y analizar otro tipo de inversiones.

La respuesta no es sencilla y tiene que analizarse caso por caso debido al riesgo específico de cada empresa. Brasil no es más que otro caso de apalancamiento corporativo entre los emergentes, ya que la deuda corporativa de las economías de mercados de ese tipo ha aumentado mucho durante los últimos 10 años.

La situación incluye tasas cero para el dólar y el euro y una gran emisión de billetes por parte de todos los bancos centrales, que, en algunos casos, se terminaría pronto.

Según un reporte del Fondo Monetario Internacional, la deuda corporativa de las empresas no financieras (excluyendo a bancos, administradoras de inversiones y de seguros) en las principales economías emergentes aumentó de 4 billones de dólares en 2004 a más de 18 billones de dólares en 2014. Continuar leyendo

Cómo transfiere riqueza la caída del precio del petróleo

La caída en el precio del petróleo a sus mínimos de 5 años y retrotrayéndose a una época a la cual nadie quisiera regresar, julio del año 2008, impactará en forma selectiva en las empresas, en función de si son productoras o si el petróleo representa un insumo en su estructura de costos de producción.

Entre las distintas economías mundiales, el impacto pasa básicamente por saber si son productoras de petróleo y exportadoras netas, o bien economías importadoras netas de commodities energéticos.

Las empresas del sector de petróleo han sido de las más afectadas este año, cayendo en EE.UU. un 13%, contra una suba del 13% en el índice S&P 500. Algún sector evidentemente se está beneficiando de esta coyuntura.  Continuar leyendo