Aerolíneas, el país del derroche

Eduardo Amadeo

Los bienes públicos (aquellos a los que tienen acceso todas las personas por el sólo hecho de ser ciudadanos) son la más importante herramienta de equidad y calidad de vida. Los países que han tenido mas éxito en su lucha contra la pobreza son aquellos que brindan servicios públicos de mejor calidad.

No hay salida de la pobreza únicamente con transferencias monetarias, si la economía no crea oportunidades y si los bienes públicos no discriminan a favor de los mas débiles.

Pero ningún país ha logrado que sus ciudadanos salgan de la pobreza invirtiendo fortunas en una compañía de aviación, cuyos clientes son, en un 100 % , personas no pobres. 

El problema del acceso a condiciones de vida dignas, no es menor en nuestro país. Según el Observatorio de la Deuda Social Argentina, el 60% de las familias más pobres no tiene acceso a agua y cloacas; el 55% no tiene acceso a gas por red y el 42% vive en barrios cuyas calles se inundan.

Ante estas cifras, los montos dilapidados por Aerolíneas Argentinas, muestran todo su dramatismo y sobre todo su inequidad.

Como lo acaban de demostrar las inundaciones, la falta de inversión castiga sobre todo a los más pobres, a aquellos que no tienen como defenderse. Llovió la misma cantidad de agua en el Conurbano que en la Ciudad, pero la Ciudad no se inundó, porque el dinero no se despilfarró , sino que se invirtió en infraestructura.

La gran pregunta entonces es: ¿en qué ayuda Aerolíneas a la equidad en la Argentina?

Para que tengamos una idea clara sobre lo que se puede hacer con ese dinero:

  • Con 1100 millones de dólares se pueden construir 70 hospitales de 180 camas cada uno, completamente equipados.
  • Con 1100 millones de dólares se pueden construir 250 escuelas de jornada completa, con equipamiento de última generación.
  • Con 2 meses de déficit, se puede multiplicar por 20 la cantidad de personas asistidas para curar su dependencia a las drogas, pasando de las 1500 actuales (que paga la Sedronar) a 30.000. En la Argentina se internan 50.000 personas por año, la mayoría de pocos recursos.
  • Con 1100 millones de U$, se pueden construir 15 cárceles , lo que implica nuevas instalaciones para 30.000 presos.
  • Con 1100 millones de U$ se puede construir  18.000  casas de 75 m2, con el modelo del PROCREAR.

Por ejemplo, los hospitales que se podrían construir beneficiarían a Chaco, Misiones, Jujuy y Formosa, provincias donde la mortalidad infantil duplica el promedio nacional. Muchos menos chicos se morirían si se invirtiese bien el dinero.

Con las escuelas de última generación, les mostraríamos a muchos jóvenes excluidos, que ellos son importantes; que vale la pena estudiar; que pueden desarrollar sus aspiraciones de mejorar en la vida. Doscientas cincuenta mmil escuelas, son 10 escuelas del siglo XXI en cada provincia argentina.

Con mejores cárceles se reducirían el hacinamiento y  la tasa de reincidencia y habría mas seguridad para todos.

Con más jóvenes asistidos en su lucha contra la droga, salvaríamos vida y ayudaríamos a la convivencia y la seguridad.

¿Qué país preferimos, el país del derroche de Aerolíneas, o un país bien administrado?