A 20 años del Tratado de Libre Comercio de América del Norte

Pronto conmemoraremos el 20 aniversario de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). El 1º de enero del 1994 comenzó una nueva etapa de nuestra relación con Estados Unidos (y en menor medida con Canadá), que transformó al país. Será un magnífica ocasión para sacar un balance de estos dos decenios en México y reflexionar sobre lo que viene.

En Estados Unidos ya empiezan los esfuerzos de prospección y de revisión histórica. El Council of Foreign Relations de Nueva York ya formó una comisión sobre la integración de América del Norte, presidida por Robert Zoellick, ex presidente del Banco Mundial, ex subsecretario de Estado y ex representante especial de Comercio, y David Petraeus, militar retirado, ex director de la CIA y ex jefe de las tropas norteamericanas en Afganistán. Durante un año buscarán una “gran idea” para el futuro de la región, inspirada en parte por el libro de Robert Pastor (miembro de la comisión) The North American Idea. En México no hay posibilidad de que suceda algo por el estilo, pero por lo menos podemos esperar una buena discusión sobre los saldos del TLCAN.

Continuar leyendo

Marihuana y Distrito Federal

Ayer la Fundación Miguel Alemán auspició una discusión entre seis mexicanos reunidos desde hace tiempo para debatir diversos temas, y en particular el que figuró en la convocatoria de la fundación: la despenalización del consumo de la marihuana en el Distrito Federal.

María Elena Morera, ex directora de México Unido Contra la Delincuencia, Héctor Aguilar Camín y cuatro ex miembros de los gabinetes de Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón expusimos las razones por las cuales hemos decidido apoyar esta iniciativa, y las formas que hemos escogido para hacerlo. Quisiera aquí retomar algunos de los puntos que no pude desarrollar con la amplitud que hubiera deseado.

Continuar leyendo

Timbres y puertas en la barda

Desde 2001, en Estados Unidos todo intento de modificación del esquema migratorio reviste tres características: la legalización del universo indocumentado; la regulación de flujos migratorios futuros y el supuesto aseguramiento de la frontera. A partir de 2007, los gobiernos de México decidieron no involucrarse en el debate que se diera en EEUU en estos tres capítulos, a pesar de ser obviamente un actor principalísimo en los tres. Sobra repetir que más de la mitad de la población sin papeles en EEUU es mexicana; que más de la mitad de los flujos actuales y futuros son y serán mexicanos y que la frontera es también nuestra.

Siempre estuve en desacuerdo con esta opinión sobre los dos primeros puntos, pero entiendo la lógica de prudencia, temor o reflejo antiintervencionista trasnochado para adoptarla. La postura a propósito del tercer punto ya no es un asunto de opinión sino de hechos. Así como en 2006, Bush con los senadores McCain y Kennedy, lanzó el anzuelo de la construcción de los primeros 480 km de barda, muro o cerca para obtener los votos conservadores tanto en el Senado como en la Cámara Baja para aprobar la reforma migratoria integral de entonces, hoy ”La banda de los 8’‘, con el consentimiento tácito de Obama, ha aprobado la enmienda Corker-Hoeven de sellamiento de la frontera.

Continuar leyendo