¿Cómo desconectarnos cuando estamos “siempre conectados”?

Mark Dixon
Por: Mark Dixon

All work and no play makes Jack a dull boy (literalmente, “sólo trabajo y nada de juego hacen de Jack un chico gris”) es un proverbio inglés que significa que, sin tiempo de ocio, una persona se vuelve aburrida. Hoy en día se habla de los peligros de la adicción al BlackBerry o al iPhone y la necesidad de tiempo libre. Nuestro lenguaje puede haber cambiado, pero el sentimiento es el mismo: no es saludable obsesionarse con el trabajo y excluir todo lo demás de nuestras vidas. Siempre hemos necesitado alguna manera de desconectarnos y encontrar refrescar nuestras mentes, lejos de nuestro trabajo cotidiano.

Pero, ¿cómo desconectarnos cuando estamos “siempre conectados”? La mayoría llevamos nuestro BlackBerry o iPhone con nosotros todo el tiempo, listo para enviar o recibir correos electrónicos y mensajes de texto en cualquier momento del día o de la noche. Para aquellos de nosotros que hacemos negocios en diferentes zonas horarias, la capacidad de estar conectado no es sólo un elemento útil, sino indispensable.

De acuerdo con las últimas investigaciones de Gartner[1], el número de adictos al “CrackBerry” llegará a 73 millones de personas. El ejecutivo adicto al trabajo que realiza llamadas de negocios durante sus vacaciones familiares se ha convertido en un cliché, pero para algunas personas y familias es un problema real y la omnipresencia de los dispositivos móviles dan la excusa perfecta a los adictos al trabajo.

Entonces, ¿qué podemos hacer al respecto con aquellas personas que parecen incapaces de apagar sus dispositivos móviles y dirigir su atención de todo corazón a algo? Creo que esto es esencialmente una manifestación moderna del efecto Zeigarnik[2], el nombre de Bluma Zeigarnik, psicóloga soviética que tuvo un momento eureka en 1927 en una cafetería vienesa, cuando observó que los camareros se acordaban de las órdenes sólo mientras la orden estaba en el proceso de ser servida, tan pronto la orden era entregada, el camarero se olvidaba de esta.

De la misma manera, nos inclinamos a seguir pensando en problemas del trabajo si se quedan sin resolver. Una vez que un tema se soluciona, podemos seguir adelante con la conciencia tranquila. Pero, por supuesto, no todos los problemas se pueden resolver rápidamente. Todos conocemos la sensación de tener un proyecto inacabado rondar en nuestra mente cuando estamos cansados y realmente queremos dormir un poco. Un argumento no resuelto con un amigo o compañero de trabajo puede entrar en la misma categoría. Los correos electrónicos o mensajes de texto pueden mantenernos distraídos e incapaces de concentrarnos en nada más, esperando el ping del correo electrónico o pitido del mensaje de texto como un adolescente enamorado que espera que el teléfono suene.

No es fácil, pero hay maneras de manejar este tipo de cosas. La respuesta, creo yo, es fijarse metas realistas y trabajar todos los días hasta quedarnos sin vapor – o sin tiempo. Si al final del día todavía tiene muchos pendientes, escriba una lista de “que hacer” y dejarla lista para el día siguiente. Y si hay algún problema no resuelto, trate de designar período de reflexión del mismo mediante un correo electrónico que invita a una pausa, pero que mantiene las opciones abiertas.

Al final, todo se trata de auto-disciplina. No tengo tiempo para las personas que pierden el tiempo preocupándose y nunca he estado impresionado con los que buscan avanzar en sus carreras llegando temprano al trabajo, y luego llegan al final del día sin hacer nada fingiendo trabajar. Juzgo a la gente por sus resultados. Si usted hace su trabajo, no voy a estar mirando el reloj para revisar si usted trabajo las ocho horas requeridas al día.

En este punto debo confesar que no soy muy bueno para desconectarme. Para mí, es más una cuestión de cambiar a otra cosa, encontrar algo que me proporcione un tipo de descanso mental. Así que si yo no estoy tratando con Regus, estoy pensando en otro de mis negocios.

Cada uno tiene que encontrar su propia forma de relajación. La mayoría de la gente necesita vacaciones, fines de semana para recargar las baterías, o su propia forma de tiempo de descanso. Así que si llamo alguien de mi personal y descubro que está de vacaciones, voy a colgar lo más rápido posible.

Algunas personas encuentran que la meditación o el yoga son de gran ayuda. Hacer ejercicio puede ayudar a vaciar su mente. Incluso algo tan simple como cambiarse la ropa puede poner su mente en un marco completamente diferente. Al final, no tiene nada que ver con la tecnología, ni con las vacaciones, todo tiene que ver con uno mismo. Tome una tarea a la vez y mantenga un ritmo. Asegúrese de que tiene suficiente variedad en su vida para relajar su mente. Como mis padres podrían haber dicho, un cambio es tan bueno como un descanso.

[1] Gartner Inc. es una empresa consultora y de investigación de las tecnologías de la información con sede en Stamford, Connecticut, Estados Unidos.

2 El efecto Zeigarnik define la tendencia a recordar tareas inacabadas o interrumpidas con mayor facilidad que las que han sido completadas.