Dentro de algunos años la política de prohibición de drogas pasará a ser estudiada con la misma lupa que hoy se ocupa de las peores violaciones a los derechos individuales. Afortunadamente, el experimento que se fue expandiendo a lo largo del globo a partir del primer cuarto del siglo pasado y que se vigorizó a partir de la década de 1970, está llegando a su fin. Los resultados adversos de la política mundial prohibicionista son el motor que comienza a impulsar la relegalización de drogas en todo el mundo.