Algo raro y atípico está ocurriendo en estas elecciones, las que se celebrarán el 22 de noviembre. Lo inusual y peregrino, pues nunca pasó con el peronismo, es la gigantesca movilización intelectual a favor del candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli.
Declaraciones, solicitadas, manifiestos, ensayos escritos a las apuradas de ciudadanos “bien pensantes” nos alertan sobre los terribles males que acarrearía el triunfo de Macri para el país y el pueblo trabajador. Esta “intelligentzia”, al decir de Arturo Jauretche (intelectuales desconectados de las necesidades del pueblo), que se arroga la centralidad del saber, nos previene acerca del posible triunfo de la derecha. Rectores de universidades, actores, intelectuales destacados de las ciencias sociales y de las otras. Sindicatos docentes, agrupaciones de profesionales y de estudiantes universitarios, profesores secundarios, maestras, sicólogos, politicólogos, periodistas, bandas de rock o pop y una larga fila de pensadores “comprometidos con la lucha popular” emulan, sospecho que sin saberlo, la infinidad de manifiestos que sus antecesores “culturosos” redactaron para impedir el triunfo de Domingo Perón en 1946. Continuar leyendo