Juan López había nacido en un pueblo junto al río color de león.
John Ward, en la ciudadpuerto que luego sería música, en la margen izquierda del Mersey.
Juan había ayudado en las labores de la chacra desde muy chico. Su padre le había dicho que el trabajo los sacaría de la humildad.
John esperaba a su padre al regreso de la fábrica cada día. Su padre le contaba cada noche lo duro de su tarea y lo injusto de su salario.
López estudiaba de noche luego de la faena. Su madre insistía en que si quería progresar debía completar el secundario, por lo menos.
Ward empezó a trabajar de muy equeño. Apenas pudo completar su enseñanza elemental. La fábrica no le dejaba tiempo libre. Continuar leyendo