Timerman, el renegado

Es muy triste tener que hablar mal de un conciudadano a quien apreciaba desde mi adolescencia. Admiré a su padre y a su madre como judíos y como argentinos comprometidos con su tiempo. Me siento también ligado afectivamente con su familia política.

Me cuesta entender lo que le pasa. Y no por su afiliación política, hecho con el que puedo discrepar, pero que no justifica los extremos a los que ha llegado.

Estoy convencido que fue él mismo quien convenció a la Presidenta de negociar el vergonzoso “Memorandum de Entendimiento” con Irán y quien le aseguró que obtendría la cobertura política de la Comunidad judeo-argentina para tal obseno propósito. Seguramente le prometió que recibiría también el apoyo del Departamento de Estado Norteamericano que ya estaba avanzando en su intento de acuerdo nuclear con Irán.“Lo ocurrido durante los últimos 30 años (lo numerosos atentados patrocinados por Irán en todo el mundo)  debe ser borrado del mapa. Eso es la “real-politik” y nosotros podemos insultar con la boca a los E.E.U.U. mientras le hacemos un favor con la lapicera” puedo imaginarlo susurrándole al bien predispuesto oído presidencial.

Nada de eso ocurrió y, para colmo, la justicia argentina declaró inconstitucional el libelo. Seguramente fue él también a quien se le ocurrió la idea de juntar en la misma conspiración a “la DAIA, la AMIA, los fondos buitre y Nisman” y, para coronar tal genialidad, nada mejor que renunciar a las dos instituciones a las que pertenecía.

Nadie ha entregado tanto al altar cristinista como este renegado de su identidad milenaria. Muy mal argentino tiene que ser aquel que abjura de su familia y de su origen. ¡Cuán difícil deberá ser mirar a los ojos de sus propios hijos! La Presidenta debería premiarlo con un lugar en la fórmula presidencial. Nadie de “La Cámpora” ha sacrificado tanto como él por amor a su jefa.

En su delirio, debe sentirse como el profeta Aaron al borde de sacrificar a su hijo Isaac siguiendo una instrucción divina. Fue Jehová quien le aclaró que sólo lo había puesto a prueba. Claro que Jehová es Dios y Cristina es sólo Cristina.

En la tradición judía hay una institución llamada el “Herem” (equivalente a la excomunión Cristiana). No hubo demasiados casos, e incluso hubo dos muy injustos: en el siglo XVII al filósofo Baruj Espinoza y en 1918 al revolucionario Leon Trotski.

Héctor Timerman sería un merecido caso.

¿Qué es el acuerdo 5+1 firmado con Irán?

Se trata de un acuerdo firmado en Ginebra el pasado día jueves entre EEUU, Rusia, China, Inglaterra y Alemania con Irán. Es un “acuerdo interino” hasta tanto se suscriba el definitivo el próximo 30 de junio.

Sus puntos principales son los siguientes:

1) Limitación de centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio de las actuales 19.000 a 6.000 por 10 años. Se concentrarán en la Planta de Natanz mientras que la de Fordow será desmantelada y tranformada en un Centro de Investigación.
2) Reduccion del stock de uranio enriquecido de 10.000 kgs. A sólo 300 kgs. Por 15 años.
3) Tanto las centrifugadores como el stock de uranio excedentes serán almacenados en Irán en instalaciones bajo el control de la IAEA ( la Agencia internacional de control de la Energía nuclear).
4) Por 15 años , Irán no podrá construir ninguna facilidad adicional para el enriquecimiento de uranio
5) El “período crítico” para acumular suficiente material como para producir una bomba se extiende a 1 año, durante los primeros 10 años.
6) La IAEA tendrá completo acceso a las instalaciones nucleares iraníes por los próximos 25 años e Irán firmará el Protocolo Adicional al TNP ( tratado de no proliferación) por el cual se refuerzan los controles del tratado original.
7) Irán va a rediseñar su planta de Agua Pesada (para el procesamiento de Uranio) en Arak para producir solo radioisótopos. Los stocks de plutonio acumulados será sacados del país y no podrán acumularse stocks por 15 años.
8) La sanciones económicas existentes se levantará a medida que la IAEA verifique el cumplimiento de lo acordado y podrán volverse a poner en práctica si se viola lo acordado.

Israel y Arabia Saudita están en contra de lo suscripto por entender que irán podrá violar fácilmente los controles establecidos. Lo mismo opina la mayoria Republicana en el Congreso norteamericano.

El presidente Obama tiene facultades propias para firmar el acuerdo y para “suspender” las sanciones. El levantamiento total sólo puede hacerse por votación del Congreso.

Sin lugar a duda, el acuerdo es un paso muy importante para levantar uno de los peligros globales más graves que enfrentaba el planeta. Asimismo, blanqueará la cooperación que Irán está prestando para combatir al Estado Islámico (y que, seguramente, será incrementada) que hoy ocupa parte del territorio de Irak y de Siria.

También consolida la rebaja del precio del petróleo que ya cotiza por debajo de los u$ 50 dólares.

El verdadero alcance de esta negociación así como sus consecuencias finales sólo podrán evaluarse en el tiempo.