Un nuevo debate en torno a la libertad de expresión se ha dado en los últimos días, respecto del uso excesivo de la cadena nacional por parte de la Presidenta, y de la actitud del Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, de romper un diario en plena conferencia de prensa. La Presidenta sostuvo que la libertad de expresión es para los 40 millones de argentinos, incluida ella, de modo que tiene la libertad de expresarse cuando lo desee, sin que ello sea una razón para ser criticada.
Esta concepción del derecho a la libertad de expresión, y en general de todos los derechos individuales, no es exclusiva de la Presidenta, sino que subyace a todo el pensamiento kirchnerista. La idea es que el Estado, como cualquier ciudadano, tiene derechos constitucionales y puede ejercerlos cuando lo desee. Continuar leyendo