Algunos argumentos económicos en favor de la reforma migratoria se han enfocado sobre el crecimiento económico y la innovación. Por ejemplo, en la creación por inmigrantes de empresas de alta tecnología, o en la contribución de los trabajadores altamente calificados en empresas innovadoras. Menos se ha escuchado sobre lo que puede llamarse el “dividendo demográfico” de la inmigración.
La población en varias economías avanzadas y en China, por la política de un solo hijo, está envejeciendo y disminuyendo rápidamente. La disminución natural de la población ocurre cuando el número de defunciones excede el de nacimientos. En Estados Unidos, debido a la inmigración, la población sigue aumentando. Sin embargo, cifras recientes divulgadas por la Oficina del Censo, el pasado 13 de junio, revelaron que, en 2011-2012 por primera vez en este siglo, entre la mayoría blanca el número de fallecimientos excedió el de nacimientos en 12,419. Además, este indicador ha estado declinando consistentemente, desde 319,535 más nacimientos que defunciones en 2006-2007. La razón por la cual esto no se refleja en el crecimiento de la población estadounidense es por el aumento en el número de nacimientos entre las minorías.