Al joven John le pagaban por leer. Su padre compraba un libro y se lo entregaba. Después de leerlo, lo recompensaba con la misma cantidad de dinero invertido, por supuesto, tras un ejercicio de comprobación. Una vez, John le dijo al padre: “A los demás muchachos del pueblo les pagan por ayudar en la casa, ¿por qué tú no lo haces igual?”. El padre respondió: “Yo no te voy a pagar por eso. Puedes ayudar con las tareas, porque eres parte de la familia. Te voy a pagar por leer libros, porque quiero que pienses de forma correcta”.
Pensar de forma correcta significaba que su hijo pensara en grande, típico en las personas exitosas. El padre estaba seguro de que la buena lectura ayudaría a su hijo. Ya conocía la obra La magia de pensar en grande, de David J. Schwartz y nunca olvidaba una frase clave: ·”En términos de éxito, no se mide a las personas en pulgadas, libras, grados académicos u origen familiar; se las mide de acuerdo con la talla de su pensamiento”.
Aquel joven John es considerado hoy día el principal experto en liderazgo del mundo. Asesora a importantes personalidades, empresarios exitosos y hasta a presidentes. Es autor de más de ochenta libros e imparte conferencias en todos los rincones del planeta. John C. Maxwell comenzó a forjar su pensamiento de grandeza desde adolescente, gracias a su padre. Continuar leyendo