¿Qué ocurre con el cepo?

El asunto del cepo está en boca de todos de cara al ballotage del 22 de noviembre, en donde Mauricio Macri y Daniel Scioli se enfrentan con propuestas muy diferentes. El primero lo eliminará de manera inmediata, mientras que el segundo propone sostenerlo durante algún tiempo y ver si las cosas mejoran hasta que, de alguna manera, ingresen dólares y recién ahí comenzar una quita de trabas a la moneda norteamericana.

La clave para encontrar la solución a esta cuestión radica en conocer su origen: un demagógico gasto público que no pudo ser sostenido ni siquiera por la mayor presión tributaria de nuestra historia, por lo que se recurrió a la famosa maquinita de imprimir billetes, es decir, a la expansión monetaria, aumentando la oferta de pesos muy por encima de la demanda, por lo que su valor frente a los bienes de la economía fue cada vez menor —inflación— y, por supuesto, el dólar no escapó a esta regla, razón por la cual se necesitaron cada vez más pesos para comprar un dólar.

Como los famosos precios cuidados aparecieron para hacerle frente a la inflación en distintos bienes de consumo básico, poniéndole precios máximos a productos como la leche, el aceite, el azúcar, etcétera, el cepo apareció para ponerle un precio máximo al dólar y racionalizar su venta. Algo así como esos carteles con la frase Máximo 2 unidades por grupo familiar” que con tanta frecuencia vemos en cualquier supermercado, lo que se traduce en la combinación perfecta para la escasez: un bien exiguo, pero barato. Continuar leyendo

La economía de la improvisación

El país enfrenta una situación adversa en materia económica desde hace ya bastante tiempo. Con una inflación que se estima que llegará al 40% anual para diciembre, un dólar blue que se acerca cada vez más a los 15 pesos aumentando así la brecha con el dólar ficticio -o también llamado oficial- y con cada vez más trabajadores en la calle, el gobierno parece no saber qué hacer para solucionar los problemas.

Es tan llamativo como deprimente y vergonzoso el afán que tiene el oficialismo por “emparchar” toda situación adversa como si de esa manera se llegara a una solución. Continuar leyendo