Cuando llegamos al mes de julio, bastante agotados luego de medio año de trabajo, y esperando ansiosos la llegada de las vacaciones de invierno para disfrutarlas con nuestros hijos o amigos, tenemos que realizar un último y valioso esfuerzo.
Consiste en tomar algunos recaudos y prevenciones para que nuestros quince días de descanso no traigan malas noticias y podamos prevenir cualquier mal trago. Es por eso que quiero compartir algunos consejos sobre seguridad en invierno, para pasar unas vacaciones tranquilas y con mucha alegría. Para ayudar a que esto suceda, hay una serie de recomendaciones que debemos tomar nota:
- La casa tiene que estar como si estuviéramos nosotros en ella. Por ejemplo: evitar la acumulación de correspondencia o periódicos que son una clara muestra de que no hay nadie habitando la casa. Lo ideal es avisar a un vecino de confianza que estará ausente por unos días.
- Regar el jardín y mantener el césped corto y sobre todo en esta temporada del año, no dejar que se acumulen las hojas de los árboles y las ramas de la poda.
- Si hay un casero, en el caso de que un extraño toque timbre y pregunte por los dueños, que esta persona se encargue de destacar que “van a volver más tarde”.
- Lo mismo para los llamados telefónicos. Respuestas ambiguas, no contar ningún dato concreto.
- Si posee una alarma instalada, haga chequear y revisar su funcionamiento previo a la partida.
- Evitar comentar los planes y las fechas de vacaciones en lugares cotidianos tales como la peluquería, panadería, o el supermercado. Aquí se puede filtrar información en la que cualquier desconocido puede estar tomando nota.
- En el caso de las redes sociales (Facebook, Twitter), evitemos que nuestros hijos suban las fotos del lugar donde estamos vacacionando. Acá estamos trasmitiendo en vivo y en tiempo real que en nuestra casa “no hay nadie y pueden venir cuando quieran”.
- A la hora de cargar el equipaje, hay que tratar de no exhibirlo públicamente. Si no se tiene cochera ni rejas, hay que hacerlo con mucha prudencia y en hora de poco tránsito vehicular y peatonal.
- No dejar luces prendidas dentro de la casa o el departamento. La luz termina perjudicando la situación porque se ve claramente que no hay movimiento dentro de la habitación que se trasluce por la ventana.
- Desconectar o anular el timbre.
- Dejar las ventanas y las cortinas como si hubiese alguien en la casa. Si quedan herméticas estamos evidenciando que no hay nadie.
Para finalizar, vale destacar que si alquilamos una casa o un departamento ya sea en la costa, en la Patagonia o en el norte de nuestro país, es esencial disfrutar de las vacaciones, pero no podemos relajarnos totalmente como si la inseguridad no formara parte de nuestros problemas cotidianos. La atención y la precaución pueden prevenir una mala noticia en horas de descanso. Y un consejo fundamental es evitar el uso de efectivo. Utilizar las tarjetas de débito o de crédito, y llevarlas en un lugar diferenciado, en lugar de la cartera o la billetera.
Estos consejos útiles y prácticos tienen como objetivo aumentar la seguridad de las personas en la vida cotidiana, especialmente en vacaciones, donde nuestra atención puede verse adormecida.