El discurso de ayer de Cristina Kirchner, su último como Presidenta en recordación de la Guerra de Malvinas, contiene numerosos puntos de interés.
Efectuó un brillante, esperado y justísimo homenaje a los combatientes, muy en especial los que ofrendaron su vida, aspecto en el cual toda la sociedad y todos los diversos espacios políticos se han expresado siempre de manera coincidente. El respeto por esos héroes es una política de estado en Argentina. Continuar leyendo