Finalizadas las PASO, es una obligación, a la hora de los análisis, hacer una primera aproximación hacia la conformación del Congreso después del 10 de diciembre. El mensaje de las urnas, si las elecciones generales hubieran sido el domingo pasado, es el de la necesidad de llevar adelante una auténtica reconstrucción republicana. Este será el primer e inmenso desafío para nuestra democracia y este deberá revestir un carácter fundacional teniendo en cuenta el severo deterioro social, político, institucional y económico en el que estamos viviendo.
El escenario para el próximo Gobierno va a resultar profundamente comprometido en estos aspectos, ya que deberá afrontar la pesada herencia que dejan estos 12 años continuados de vivir en una caprichosa interpretación de institucionalidad.
Consecuentemente, debemos preguntarnos por el escenario que el próximo Gobierno tendrá llegado el 10 de diciembre y, principalmente, analizar, pensar y buscar respuestas a las realidades de Argentina. Aquí es donde nace la verdadera discusión por la gobernabilidad y la necesidad de reflotar el concepto de la audacia para gobernar.
Ahora bien, ¿qué implica hablar de gobernabilidad? Implica analizar los grados y los niveles de acuerdos sólidos y justos entre las principales fuerzas políticas que necesariamente deben ser cumplidos por todas las partes si efectivamente queremos lograr la recuperación de nuestra república. Continuar leyendo