Durante las últimas dos semanas varios de los principales periódicos estadounidenses y algunos europeos, como New York Times, Washington Post, Financial Times y Wall Street Journal, utilizaron la palabra crisis para referirse al presente de la economía argentina, un escenario que desde enero pasado incluye el cóctel de inflación, crecimiento del déficit fiscal, devaluación del peso contra el dólar y mercado dual de cambios.
Si se compara la realidad macroeconómica previa a 2011, la situación actual del país es mucho más preocupante respecto a las perspectivas futuras. Sin embargo, la historia de la Argentina y otras naciones latinoamericanas indican que tal vez la palabra crisis sea, al menos, compleja de interpretar si por ella entendemos la aceleración de ciertos problemas que ya se manifestaban desde hace tiempo, especialmente relacionados con la inflación y la rápida pérdida de las reservas.