Desde que Sergio Massa se fotografió con Gerardo Morales, el candidato de la UCR a la gobernación de Jujuy, el proceso de la desintegración del Unen parece ya irreversible. Morales no es cualquiera. Preside el bloque de senadores de la UCR y fue, hasta no hace mucho, presidente del radicalismo. Por eso, su decisión de pactar con Massa anticipa el camino que seguirán otros candidatos de la UCR en las provincias. El radical Cano, en Tucumán, tiene pensado un acuerdo similar, y lo mismo sucedería en La Rioja. La alianza de los radicales con chances electorales en las provincias con el candidato del Frente Renovador ha dejado colgado de un pincel a los ‘presidenciables’ del Unen. La fuga hacia Massa es la confesión de que ninguno de ellos tiene posibilidades reales y que son considerados salvavidas de plomo por sus punteros provinciales y municipales. No debe sorprender que Cobos y Binner hayan puesto el grito en el cielo contra esos acuerdos, viendo un vaciamiento de sus respectivas candidaturas. Debido a ello, la variante más probable es que ambos terminen desistiendo de sus ambiciones presidenciales para refugiarse en sus propias provincias. Ya se comenta que Cobos iría de candidato a gobernador por Mendoza y que Binner volvería a postularse en Santa Fe, apremiado por la crisis del propio Frente Cívico. Continuar leyendo