La cita para la ciudadanía venezolana, fijada el próximo 6 de diciembre, no es un dato menor. El Consejo Nacional Electoral anunció las elecciones parlamentarias como si se tratase de una simple convocatoria cuando en realidad lo primordial es establecer las condiciones bajo las cuales se llevarán a cabo los comicios.
Lo cierto es que la dirigencia política a nivel mundial se está haciendo eco desde hace tiempo de una serie de demandas ligadas no solamente a los derechos humanos, sino a la esencia misma de la democracia en ese país.
En el informe anual sobre derechos humanos de 2014, el Departamento de Estado de los EEUU denunció al actual Gobierno de Nicolás Maduro por ejercer una judicatura selectiva a la hora de dirimir cuestiones judiciales por arresto y encarcelamiento de opositores al régimen y juicios regularmente retrasados. Sumado a ello, se encuentran coartadas las libertades de expresión y de prensa. Continuar leyendo