Pasada la resaca de un domingo bebiendo cerveza con varios amigos, José Pablo arma con desgano su tenderete donde vende CD piratas con filmes de Hollywood y narconovelas mexicanas o colombianas.
En un estante usted puede encontrar las películas ganadoras del Oscar 2015 y escondidos en una desgastada mochila negra, una colección de videos pornográficos de producción nacional y foránea.
José Pablo es un tipo locuaz. Pero cuando usted le pregunta qué beneficios le puede reportar a los cubanos la próxima Cumbre de las Américas, a efectuarse el 10 y 11 de abril en Panamá, hace una mueca con sus labios y responde: “Nada. Todas esas cumbres, sean iberoamericanas, de la CELAC o ésta, son más de lo mismo. Discursos cargados de promesas que al final no resuelven nada. Todo se queda en retórica. Es un gasto de dinero innecesario”. Continuar leyendo