Se especula con el gobierno que viene, en el que las opciones a nivel nacional parecieran reducirse a dos posibles candidatos, que son quienes mejor encarnan el sentimiento de la oposición, pero lo que está claro, es que el kirchnerismo, como opción de gobierno, se agotó.
No hay chances para otro candidato kirchnerista. De allí el desconcierto oficial al que asistimos a diario, que llega al extremo de mostrar como desde el propio gobierno se acusan unos a otros, de tirarse con “muertos”, como si la vida humana no tuviera ningún valor. Tan potente resulta la reacción que provoca el actual gobierno, que pareciera que para cambiar este estado de cosas los argentinos debiéramos concentrarnos tan solo en la elección del próximo Presidente de la Nación. Sin embargo, lo que muchos parecen pasar por alto es que tan importante como elegir al próximo Presidente, es elegir al próximo Gobernador de la Provincia de Buenos Aires. Continuar leyendo