Hasta mediados de la década del 2000 no resultaba raro que los contenidos audiovisuales (películas, videojuegos, discos musicales, series de televisión, etcétera) se distribuyeran principalmente a través de su venta en locales minoristas especializados en venta de estos contenidos en soportes físicos para su póstuma reproducción en dispositivos dedicados a este fin. Pero este modelo de distribución tradicional está desapareciendo frente al aumento de la distribución digital. El mundo mobile es uno de los principales responsables y está fomentando la descarga de contenidos directamente de Internet, sin que medie un soporte físico.
En España, ya en el año 2009, más del 70 % de la población era consumidora de contenidos digitales (incluyendo videojuegos, películas, música, portales y publicaciones). Y las cifras no han hecho más que incrementarse. La llegada de consolas como la PlayStation 4 permite la descarga de videojuegos en línea, así como también ampliaciones o contenidos exclusivos, sin ninguna intervención de soporte físico. Este paso de la distribución tradicional en soporte físico (antiguamente los casetes, hoy los DVD y los Blu-ray) a la distribución en línea ha sido posible gracias al incremento de las conexiones de banda ancha, tanto en cantidad de usuarios y dispositivos conectados como también de velocidad de la transmisión. Continuar leyendo