Después de ser pionera en el mundo en materia educativa, Argentina ha deteriorado su rendimiento en términos de calidad, y los indicadores Pisa demuestran la realidad que atraviesa nuestro país. Pero es posible cambiar y mejorar nuestra educación para permitir un futuro mejor para la provincia y para cada familia entrerriana.
La situación de la provincia de Entre Ríos se encuentra relacionada con la nacional. Un análisis detallado de los indicadores muestra que tenemos algunas cuestiones estructurales que debemos mejorar. El gasto promedio por alumno de Entre Ríos está por debajo del promedio nacional, al igual que el sueldo de los docentes de la provincia comparado con sus pares de otras partes del país. El impacto sobre la calidad educativa es claro y se traduce en, por ejemplo, índices de repitencia que son mayores al del resto del país. En consecuencia, nuestros chicos no se encuentran preparados para encarar los desafíos que les presenta el siglo XXI ni para aprovechar plenamente sus oportunidades. Como padres, abuelos, hermanos, tíos y ciudadanos es nuestra responsabilidad garantizar que todos los chicos tengan la posibilidad de ir a la escuela para recibir una educación gratuita y de calidad.