La conformación de espacios políticos debe efectuarse desde los partidos políticos y no en contra de estos.
En el espectro opositor se ha puesto de moda hablar de espacios políticos, más allá de los partidos. Se dice, con algo de razón, que por qué no sumarnos aquellos que pensamos más o menos parecido. Justamente, para eso nació la doble vuelta, que permitió sumar los segmentos más parecidos de la opinión en una u otra opción.
Está claro que la oposición al Frente Amplio tiene que ofrecer una alternativa viable, capaz de generar confianza. En el comienzo de este tercer gobierno del Frente Amplio se advierten ya desgastes importantes y todo hace pensar que estos continuarán, porque su incoherencia ideológica ya hoy es insoslayable. Está claro que de un lado están los que creen que el desastre educativo merece un tratamiento y quienes piensan que estamos en el mejor de los mundos. Así como hay quienes creen que el Uruguay debe estar en el mundo comercial y quienes pararon la negociación preliminar del TISA, aun sin saber su contenido, por simple rechazo a la globalización.
Lo ocurrido en Venezuela y en Argentina alienta a la oposición y con razón. Pero la lección hay que entenderla en toda su dimensión. Continuar leyendo