El sistema de “inscripciones online” para el ciclo lectivo 2014 ha sumido a la Ciudad en una grave crisis educativa. Según ha trascendido, existirían 17.600 alumnos sin vacantes, la mayor parte de los cuales pertenecen al nivel inicial (jardines). Pero esta cifra debe ser aun mayor: después de las inscripciones, y luego de haber recibido un mail de confirmación, miles de familias fueron colocadas en “lista de espera” o con vacante condicional.
En cualquier caso, y por las características del sistema online, la verdadera demanda de matrícula es un secreto celosamente guardado por el gobierno de la Ciudad. Los docentes, alumnos y padres han quedado completamente apartados del proceso de inscripción: la decisión de la escuela asignada y de la propia existencia o no de una vacante están bajo el arbitrio exclusivo y despótico del Ministerio de Educación.
Es claro que la incertidumbre en relación a las vacantes reclamadas empuja a muchas familias, particularmente en la enseñanza inicial, a buscar una vacante en escuelas o jardines privados.