La oposición argentina apesta. Listo. Nos sacamos un tema de encima. Un prejuicio que se volvió juicio con cada ley pedorra que la oposición le votó al kirchnerismo, desde la truchada de Aerolíneas hasta la inescrupulosa estatización de Ciccone.
Papelón tras papelón los políticos no K, ex K, futuros K, todo aquel que hoy, en este momento, no se considere cristinista, van abriendo su paso hacia la mediocridad, hacia la vergüenza y por sobre todo hacia la indiferencia total de la ciudadanía.