Las tragedias que sacuden a la Argentina no parecen encontrar la luz por medios propios y quizás ha llegado la hora de reflexionar sobre la conveniencia de aprovechar las herramientas que ofrece la cooperación internacional para las investigaciones judiciales no resueltas. Ya no es posible que sucesos gravísimos en la vida de todos terminen siempre sin solución. Es desilusionante y atemoriza. El tendal de dolorosas muertes exige un cambio de lógica y un mejor reconocimiento sobre las eventuales limitaciones sean técnicas o políticas. Es hora de empezar a pensar que la búsqueda de verdad y justicia debe tener prioridad para poner fin a un ciclo demasiado largo de impunidad.
Un número de países amigos han sido generosos al ofrecer medios técnicos para asistir en las investigaciones judiciales sensibles. La Argentina hasta ahora ha sido rehacía en aceptar esa asistencia. Quizás sea oportuno cambiar de actitud. El candidato presidencial Sergio Massa, por su parte, ha sugerido ofrecer recompensas a quienes puedan aportar información relevante para los casos en investigación. También ha señalado la importancia de eventualmente convocar expertos internacionales que asistan en las investigaciones. Continuar leyendo