La convocatoria de Máximo Kirchner a confrontar con su señora madre en las próximas elecciones, es una falta de respeto a la sociedad y a la República. Confieso desconocer cuáles son los antecedentes del señor Máximo Kirchner, ni sus méritos -si es que tiene alguno-, para ocupar un sitial de privilegio frente a un micrófono en nombre y representación de un partido político; nada menos que del partido político que gobierna. Quisiera creer que no le da ese derecho, el solo hecho de ser el hijo de la Sra. Presidente. Digo, porque ello no solo hablaría mal del hijo sino peor de la madre que lo permite. Continuar leyendo