En los últimos dos meses, el precio del barril de petróleo West Texas Intermediate (WTI) ha sufrido nuevas bajas de importancia que lo llevaron desde niveles máximos de recuperación en 50,9 dólares a los valores actuales de 37 dólares por barril, que representan el nivel de precio más bajo para el commodity desde comienzos del año 2009, cuando este alcanzara un piso de importancia tras la fuerte caída sufrida por la crisis subprime.
Si bien la reversión alcista que se observara en los precios en el pasado mes de agosto alimentaba técnicamente las chances de un piso de mayor importancia al observado, que por cierto podía habilitar una recuperación más allá de los máximos conseguidos en los 50,9 dólares por barril, con la caída de los últimos dos meses perforando esas instancias de mínimo, debemos decir que una vez más el petróleo ha quedado vulnerable y con posibilidades de seguir agudizando, al menos de corto plazo, la caída en su cotización.
En efecto, el quiebre de los mínimos de agosto pasado en torno a los 37,9 dólares alienta las chances de mayores debilidad de corto plazo para el commodity, que puedan alcanzar de lleno las instancias de mínimos del año 2009 en torno a los 34-32 dólares por barril. Allí se presentará una nueva posibilidad de marcar un piso e intentar recuperar posiciones a las fuertes pérdidas sufridas a lo largo del último año y medio, al menos. Continuar leyendo