Desembarca la ley orgánica del Ministerio Público

La ley orgánica del Ministerio Público Fiscal (MPF) empezó a rodar en la esfera judicial y desde la Procuración General ya están preparando el terreno para su aplicación en marzo próximo. Dado que los tiempos apremian -ya que la legislación comienza a regir en marzo de 2016-, desde el organismo que dirige Alejandra Gils Carbó pusieron el pie en el acelerador y, según pudo conocer Infobae, se encuentran trabajando en la adaptación de tres edificios donde comenzará a funcionar el nuevo sistema de fiscalías que se busca implementar.

Esta nueva estructura que fija la legislación sancionada presenta un esquema totalmente diferente en lo que refiere a la organización del trabajo de fiscales y fiscalías -que pasan de ser una estructura en espejo, donde por cada instancia judicial había un fiscal, a organizarse en fiscalías de distrito-, un tema que a lo largo de algunos meses fue resistido por algunos actores judiciales y que hoy llegó para instalarse.

Lo cierto es que mientras las miradas en el país están puestas en el escenario electoral, en la Justicia ya se comenzó a atravesar el que significa un contundente cambio en la organización y el desarrollo de los procesos judiciales, donde los fiscales pasarán a desempeñarse bajo un nuevo esquema de trabajo sobre el que aún no se sabe a ciencia cierta la forma en qué se materializará. Continuar leyendo

Desafíos judiciales para el próximo gobierno

Mientras el foco del país está posado sobre las elecciones y las miradas de las esferas de poder puestas directamente en octubre próximo, detrás de bambalinas siguen gestándose importantes transformaciones en el plano judicial que tienen su puntapié inicial en 2015, pero que deberán afrontar aquellos que resulten los nuevos gobernantes del país en 2016.

Entre los temas top de la lista judicial que deberán atender los gobernantes que resulten electos se encuentra principalmente la conformación de la Corte Suprema de Justicia. Varios fueron los intentos del oficialismo por reformar su integración: propusieron el rechazado pliego de Roberto Carlés, en un primer intento de avanzar con un candidato afín; luego se sucedieron varios rounds de público conocimiento y aún pesa sobre el ministro de la Corte, Carlos Fayt, un intento de la Comisión de Juicio Político por pedirle una revisión psicofísica. Así es que el polémico tema de la integración de la Corte tendrá sin dudas su nuevo capítulo en 2016, y el rumbo podrá variar desde la ampliación de sus integrantes, el intento de recambio de sus miembros hasta dejar -en un primer momento- que la Corte siga trabajando con sus cuatro ministros, como lo viene haciendo, en una clara señal de lograr una suerte de pacificación con el máximo tribunal. Obviamente cada movida dependerá del color político que llegue a la Casa Rosada luego del proceso electoral. Continuar leyendo