Cuando en 2009, Benedicto XVI aplicó a las intrigas de la curia el dicho de San Pablo: ” Pero si os mordéis y os devoráis mutuamente, ¡mirad no vayáis mutuamente a destruiros!”, decía toda la verdad. La ferocidad con la que hace diez meses Ettore Gotti Tedeschi fue expulsado de la presidencia del Instituto de las Obras de Religión, el “banco” vaticano, responde plenamente a esta descripción.