El fin de los subsidios a la clase media

Pocos gobiernos han hecho de los subsidios una parte central de su política económica. Sin embargo, a lo largo de estos años se han ido acumulando subsidios de toda clase y para todo tipo de situación.

Subsidios para pobres, para la clase media, para los ricos. Para consumidores y para empresarios. Para trabajadores y para jubilados. Todos estamos subsidiados en alguna forma y así es como esta economía ya perdió toda noción de lo que cuestan las cosas.

Entre la inflación, los descuentos y los subsidios ya no sabemos los precios de casi nada.

Los subsidios se han ido acumulando como capas geológicas. No es que uno reemplaza a otro; un nuevo subsidio se suma a otro ya existente.

Si bien los subsidios a las clases más bajas tienen mucha prensa, tanto buena como mala, uno de los grandes beneficiarios de los subsidios es la clase media argentina.

Vamos a ir describiéndolos a medida que han ido apareciendo, para luego ver cuáles van a desaparecer después de octubre.

 

Los subsidios de la crisis

Estos subsidios tienen su origen en la crisis del 2002 y están focalizados principalmente en los servicios públicos. Aquí se encuentran los conocidos subsidios a la luz y el gas en los hogares y -a menor escala- en empresas y comercios.

En el ámbito del Area Metropolitana de Buenos Aires se acentuó el subsidio al transporte público, colectivos y trenes que, si bien es general, también  abarca a la clase media. El total de subsidios este año alcanza los 100.000 millones de pesos.

 

Los del crecimiento basado en el consumo

Desde el 2009 el gobierno decidió promover el consumo como forma de incrementar el crecimiento económico. Para ello se basó en fomentar el crédito subsidiado al consumo. Así aparecieron las compras en cuotas sin intereses, luego el préstamo personal a tasa fija a cinco años en un contexto de inflación creciente. Algunas empresas también se vieron beneficiadas, por ejemplo, con los créditos del bicentenario, una tasa de interés del 9,9% anual o los créditos al 15,25% anual forzados por el BCRA, entre otros.

Ambas tasas de interés muy por debajo de la tasa de inflación.

 

Los del cepo

Con la implementación del cepo cambiario apareció el dólar blue, como contrapartida al dólar barato que es el oficial. Por lo tanto desde el 2011 aparece de forma creciente el subsidio a los viajes al exterior primero, y luego a la compra de autos importados, principalmente los de alta gama.

Con los viajes al exterior, fundamentalmente a los Estados Unidos, el subsidio se hace extensivo a la compra de ropa y de gadgets electrónicos. Pasa lo mismo con las compras en países vecinos. Ir a Chile a comprar electrónicos y pagarlos con tarjeta de crédito es un clásico en algunas provincias limítrofes. El monto del subsidio alcanza en algunos casos al 60%, que es la diferencia entre el 9,40 del valor del paralelo y el 5,75 del oficial

 

Las medidas post PASO

Pasadas las elecciones, los beneficios a una parte de la clase media se incrementaron, subiendo el salario mínimo que no paga ganancias a 15.000 pesos por mes, más el incremento para la asignación por hijo. El gobierno sigue presionando a bancos para dar créditos a tasas subsidiadas.

 

Recompensa el subsidio

Estos son parte de los subsidios que están presentes en el día a día. Por supuesto no es todo regalo, dado que la presión impositiva es elevada y la inflación está comiendo parte de los ingresos.

Pero el gobierno fue recompensado en las elecciones por estos subsidios que le llegan a la clase media. Por primera vez el Frente para la Victoria  sacó más votos en el primer cordón del GBA (34% de los votos) que en el segundo cordón, donde hay menos clase media, que sacó 32%.

La  inflación nos pega a todos, pero más a las clases más bajas, y los beneficios del tipo de cambio desdoblado lo tiene sólo la clase media. Eso se reflejó en los votos de agosto.

 

Después de Octubre

Estos subsidios no fueron pedidos ni reclamados. Se fueron sumando como consecuencia de diferentes políticas económicas, la mayoría descoordinadas y sin una evaluación seria de todas las consecuencias que tendrían.

El problema es que estos subsidios en general y a la clase media en particular no son sustentables. El déficit fiscal y la pérdida de dólares de las reservas del BCRA no permiten que esto dure mucho tiempo más.

Por lo tanto es seguro que esta acumulación de subsidios no puede seguir existiendo y lo que se discutirá es la forma de ir eliminándolos. La única duda será la reacción de los beneficiados cuando se eliminen estos subsidios.

Dialogo económico: más de lo mismo, mismos resultados

Einstein decía que “la locura era seguir haciendo lo mismo y esperar resultados distintos”.

Es evidente que el clima político se puso más tenso luego del resultado de las PASO, y probablemente siga esa tendencia luego de la reunión en Santa Cruz donde la presidente convoco a empresarios, banqueros y sindicalistas, para evaluar el entorno económico. Esta será la famosa reunión con los “titulares”.

Es obvio que para el gobierno la economía ha jugado un rol importante en el resultado electoral junto con la inseguridad y es por esto que convoca a reunirse, pero ¿será para hacer cambios?

La culpa es tuya, tuya…

El gobierno piensa y, el viceministro de Economía lo ha confirmado el jueves, que todo lo que hace lo hace bien y por lo tanto si las cosas salen mal es por culpa de una mala intención y/o conspiración de los empresarios que no solo son culpables de la inflación, sino que el dólar blue esté cerca de 9 y que las inversiones no se hagan tan rápido como el gobierno quiere.

Es decir, el Gobierno hace todo perfecto y es víctima de oscuros intereses (por ejemplo que los empresarios quieren ganar plata, que los asalariados quieren conservar el poder adquisitivo de su sueldo y que los que ahorran quieren preservar el valor de lo que tanto les costó conseguir).

Por lo tanto el día miércoles será para dos temas.

El  primero es adjudicar la licitación para construir dos represas en Santa Cruz para los que no hay ningún financiamiento y que por lo tanto nunca se van a hacer.  Pero que generaran ingresos seguros para los beneficiarios vía algunos juicos contra la administración que venga.

El segundo tema es que se justificarán las acciones de gobierno en materia económica y se solicitará a todos los que vayan para que se comporten bien de ahora en adelante.

Es difícil pensar que puede suceder alguna otra cosa, ya que forma de la convocatoria no es desde la humildad del que perdió, sino de la seguridad del que tiene la razón.

Anuncios: más de lo mismo

Es esperable que luego de la reunión haya anuncios, que van a ser promocionados como resultado de la reunión y que consistirán en medidas que estimularán el consumo interno. Por lo tanto más créditos subsidiados, que todo el que pueda, lógicamente, tratará de tomar. Luego, aunque con menos posibilidad, una exención para el pago de ganancias a algunos trabajadores  y un reintento por el blanqueo para la entrada de dólares.

Vale la pena reconocer que el equipo económico es en estos temas, muy predecible. Si hay alguien que pretenda o piense que la economía tenga otro rumbo del que actualmente tiene, no espere demasiado. Los equipos económicos hacen lo que saben hacer y no hacen cambios importantes.

Como dijo el presidente de la UIA, si no hay cambios se seguirán perdiendo más votos. Ésta es la encrucijada de la Presidente. Mientras más siga con el quinteto económico,  más problemas seguirá acumulando y por lo tanto seguirá teniendo menos votos.

A un mal PASO, una oportunidad

Las elecciones de las PASO son una gran encuesta nacional que no cambia mucho el poder formal presente, pero que sí modifica las expectativas y –definitivamente– las conductas económicas.

El gran derrotado de las PASO es el equipo económico. Todas las medidas adoptadas sólo han generado más problemas que soluciones. El cepo cambiario, la inflación, las restricciones a las importaciones, el impuesto a las ganancias, y la falta de creación de empleo muestran lo que la gente entendió muy bien. Que la economía no va a ningún lado.

A estos problemas que mencionamos, las respuestas del gobierno fueron la Supercard para la inflación, los Cedines y Baade para los dólares, el Procrear y el acuerdo secreto con Chevron como fallido intento de reactivación economía. Lo cierto es que ninguna medida logró tener efecto significativo en alguno de los sectores.

El gobierno nacional tenía una agenda virtual más que real, y eso se vio reflejado en las urnas. La falta de identificación con la realidad terminó poniendo al gobierno frente a una realidad que no miraba: la gente vota según lo que le pasa y no lo que le dicen que les pasa. 

El cambio, pero no todavía

Como era de esperar -en economía siempre la previsibilidad es importante- el gobierno va a ir por más sin mirar a quien ganó. Por lo tanto, hasta octubre se vienen medidas económicas de más de lo mismo. Esto se entendió claramente luego del discurso de la Presidente. “Hay que redoblar los esfuerzos”, dijo.

El problema ahora no se limita a las órdenes que van a salir desde el gobierno, sino a quienes las van a obedecer. Las rentabilidades de muchas empresas están ya en límites que no son sustentables y las restricciones a las importaciones ponen en jaque su operatividad.

El gobierno podrá insistir con más restricciones al dólar o al sistema financiero, pero ayer perdió definitivamente la autoridad política para llevarlo adelante. Estas nuevas restricciones tendrán el mismo problema que antes. No lograrán ningún efecto y ahora, difícilmente, la tengan luego de la derrota electoral.

Moreno corre el riesgo de padecer el fenómeno del divorciado. Mientras estaban casados uno de los miembros de la pareja podía dar órdenes y el otro obedecer, pero una vez divorciados, podrán seguir gritándose más órdenes, la diferencia radica en que ya nadie las acata.

Y ese tema no es menor. El interlocutor que se siente con Moreno, hoy, ya lo hará de manera diferente. Ya no va a poder solo imponer, va a tener que ofrecer incentivos, sentarse a negociar, y eso obligará a mirarse para adentro. Quizás hasta se logre corregir lo que se viene haciendo mal.

No se trata de convicción, sino de necesidad. No es de extrañar que los pases de facturas entre los 5 principales responsables de conducir los destinos económicos, comiencen a crecer luego de este 11 de agosto.

La oportunidad

Hasta octubre habrá más de lo mismo. Todos los desequilibrios económicos seguirán creciendo, por lo que es un buen momento para hacer lo que hace mucha gente. Quienes puedan, aprovecharán las oportunidades que brinda este modelo:

  1. Seguir comprando los viajes al exterior del año que viene
  2. Comprar el auto importado
  3. Comprar maquinarias, camiones o tractores
  4. Cobrar deudas en pesos, si las hay
  5. Tomar préstamos en pesos a 5 años a tasa fija
  6. Comprar bonos dolarizados.

Porque la economía argentina va a cambiar luego de las elecciones de octubre. No creo que inmediatamente, ya que no habrá voluntad de hacerlo, pero está claro que este modo de gestionar la economía ya no convence a nadie y no logra ningún objetivo.

El cambio de gabinete económico surgirá como una necesidad si el gobierno quiere recuperar parte del electorado perdido.

Por lo tanto la economía cambiará y, probablemente, en el corto plazo no será fácil, pero en el mediano plazo será para mejor.