¿Por qué triunfan los microblogs?

José Luis Orihuela

Twitter celebró su séptimo cumpleaños con 200 millones de usuarios activos y Tumblr, tras su adquisición por Yahoo!, alcanza en la actualidad los 113 millones de cuentas.

Creadas con una año de diferencia (marzo de 2006 y febrero de 2007, respectivamente) ambas plataformas han contribuido a reformular la experiencia del medio precedente, el blog, que llevaba por entonces 10 años de historia.

Las previsiones de crecimiento de la adopción de smartphones, que para los grandes mercados de todo el mundo tiende al 50% de los usuarios de celulares, permiten anticipar una época de bonanza para las aplicaciones basadas en compartir información, fotografía y video de forma rápida, sencilla y divertida.

Del mismo modo que la limitación de los 140 caracteres resultó un alivio para los blogueros que no podían enfrentarse regularmente a la producción de textos largos, hoy parece que las instantáneas de Instagram o los clips de 6 segundos de Vine, llegan al rescate de los tuiteros sin inspiración, o con pereza, para escribir las 20 palabras que entran en un tuit.

Los blogs, que nacieron antes de que la Web se hiciera social y facilitaron esa transformación, permanecen como espacios para el texto reposado escrito en máquinas de sobremesa. Los microblogs, en cambio, son hijos de la movilidad y de la velocidad, plataformas idóneas para quienes vivimos siempre conectados.