ANTICIPO EXCLUSIVO de la última novela de Jorge Asís.
Dulces otoñales
Henry Miller y no E.L. James
Editorial Sudamericana completa en librerías la distribución de Dulces Otoñales, presentada en la carátula como la “la esperada novela erótica de Jorge Asís”.
Es el director del Portal que anticipa -en exclusiva primicia mundial- dos capítulos.
Se trata de “Acabar es de obrero” y de “Extravagancia filosófica del tantrismo”.
Se anticipa, además, la polémica introducción de las estaciones, que alude a una de las alucinantes teorías de Oberdán Rocamora, nuestro Redactor Estrella.
Con jocundo desparpajo y desesperado humor, los dos textos “intensos” de Asís que aquí se divulgan parecen adherir a la tesis de Edgar Allan Poe, enunciada en Filosofía de la composición. Es el poco frecuentado ensayo que aún mantiene la función formativa -y académica- de la reconocida carta al “joven poeta” de Rainer María Rilke.
Es donde Poe indica que “la intensidad, por una cuestión física, es necesariamente breve”.
Por último, y como en algún momento del libro se destaca, el Asís de Dulces Otoñales se muestra tributario de Henry Miller. Es el escritor estadounidense de Trópico de Cáncer, que supo reinventar París y conmover a generaciones literarias que distan de reconocerlo. Es entonces en el Miller de París y de los Trópicos donde debiera en todo caso hurgarse para encontrar lejanas inspiraciones, y nunca en la previsible proximidad de E.L. James, la dama contemporánea de las 50 sombras tan exitosas como seriales.
Carolina Mantegari
Editora del AsísCultural