De olvidos y asombros

Las personas pueden hacer que nos enamoremos por diversas razones, están los que seducen con palabras, los que usan ropa o perfumes a tales efectos, los que hacen un dispendio del gasto, los que son graciosos, las personas bellas, el carácter, hasta el caminar, y seguramente las miradas, el pelo, la cara y algunos cautivan el amor del incauto con la destreza paseandera de sus labios,  lenguas, yemas y llamas.

Hay unos pocos que logran hacer que la gente caiga redonda a sus pies, rendidos por el huracán en modo de pasión irrefrenable, de amor auténtico, que les provoca el exceso de descaro, la desfachatez total y absoluta, una sobredosis de sinvergüenzonería que deja tan confundido al cándido flechado, que solícito y atolondrado se deja arrastrar hasta las fauces del impúdico Don Juan, o la audaz Afrodita.

Fidelistas, Raulistas, Revolucionarios de cartón, Involucionarios de vidrio, comunistas del tipo cubano-soviético, ”Jamás Verdaderos Comunistas”, oportunistas que se declaran de la ideología que les permita vivir sin trabajar y sentados en el trono del poder; tengo una pregunta:

¿Pudieron olvidar las soflamas constantes, las denuncias a vuestros hermanos, los ataques, los fusilamientos, los encarcelamientos, la marginación, la expulsión al exilio a quienes no compartían el deseo de exterminar a Estados Unidos y su Imperialismo, a quienes querían un sistema donde se permitiese viajar, tener una pequeña guarapera o un gran almacén de ropa?

¿Han logrado olvidar la humillación a que sometían a los ciudadanos que hiciesen pública su sensibilidad religiosa, su elección del mundo espiritual como compendio de normas para la convivencia, la marginación, el exilio, uniéndose al veinte por ciento de la población desterrada, a que los sometieron durante cuarenta años por no ser materialistas dialécticos, marxistas leninistas?

¿Se les hace difícil recordar como pisotearon y como desterraron todo rasgo individual del ser social? ¿cómo reprimieron los puntos de vista, no digo ya divergente o contrarios a los lineamientos del dios devorador Fidel, sino simplemente que no practicase una vergonzosa obsecuencia a sus caprichos?

¿Olvidaron como persiguieron desterraron, encarcelaron, prohibieron, alienaron todo artista que se saliese del discurso oficial y de las alabanzas al dirigente máximo y decidiese mostrar voz y criterio propio, exponiendo su condición de individuo y ciudadano?

Se los pregunto por una razón simple, es que hay muchas personas que no podrán olvidar eso tan fácilmente.

Habrá algunos que pegaran un salto de asombro, un respingo hacia atrás, una expresión de sorpresa, de asco, de bronca, de incredulidad inclusive, cuando miren que sin el más minino ejercicio de constricción, de rogar perdón a las víctimas, el que está haciendo de artífice de la entrada al capitalismo de Partido único hacia lo que está viajando hace años Cuba, es el mismo que fusilara y encarcelara a varios que sugirieron un acercamiento a Estados Unidos.

Y cuando observen y vean que quien dice que quiere volver a rezar a Dios, el que ahora se siente cerca del Vaticano, quien hace loas al Papa de Roma, es el mismo que consintió en marginar a todos los religiosos, permitiendo serios abusos de la población y las autoridades con quienes manifestaban un sentimiento religioso y desterró los símbolos de adoración en la isla que no fuesen al Marxismo Leninismo.

Hay muchos que estarán contentos con estos pretendidos avances, pero se mirarán a los ojos unos a otros sin encontrar palabras, con el semblante colonizado por el asombro más espontáneo, y tras preguntarse cual es la razón por la cual esta política deban comandarla los mismos que la reprimieron con todas sus fuerzas, los mismos que derribaron la amistad con EEUU y el Vaticano, una vez superada la sorpresa y el suspiro por el súbito ataque de atracción amorosa que el influjo de semejantes sinvergüenzas les provoque, exclamarán a viva voz y con el clásico brillo en los ojos de los amantes desorientados:

¿Qué es esto Compay? ¿Eh, eh?

Los ex dictadores del proletariado que abren la puerta al capitalismo

La izquierda cuenta con una ventaja y un problema fundacional: es la vía idónea para gestionar un conjunto de valores morales, éticos, de solidaridad, de fraternidad, equidad, justicia social y que son de aplicación y expresión individuales y de masas, lo cual parece conferirle a quien se reconoce de dicha sensibilidad, un aura de superioridad moral frente a quien declara una mayor inclinación hacia la consecución de los beneficios económicos, del enriquecimiento material en detrimento del espiritual o del ansia de justicia social.

Y a su vez lo coloca en una situación contradictoria de cara a las sempiternas aspiraciones de poder, ya que en el mismo instante que la izquierda tomase el poder pasaría a ser la derecha más extrema de su propia propuesta, de las causas y los elementos fundacionales de su propia génesis.

La sensibilidad llamada de “izquierdas” a lo largo de Historia y desde la Revolución Francesa, y que ha tenido distintos sustentos ideológicos más o menos estructurados, parece incompatible con las aspiraciones a formar parte de más altas esferas del Poder. Continuar leyendo

Miseria y nepotismo

Que impresionante basura terminó siendo la Revolución Cubana, nos ha sorprendido su pestilencia incluso a los que creíamos esperar todo tipo de oportunismo de su parte.

Lo más vergonzoso no es que Fidel y Raúl ahora entreguen el país al gran capital, sin permitir a los pequeños y medianos empresarios cubanos desarrollarse y tomar esas posiciones del mercado.

Ya que reniegan incluso de los últimos flecos del paripé socialista que venían sosteniendo para autoengaño únicamente de los acólitos incondicionales, podrían permitir que fuese una nueva y promovida clase empresarial cubana, de dentro o fuera de la isla la que protagonizase el cambio.

Sin embargo lo peor no es eso, sino que se amistan con EEUU, cuna de innumerables valores democráticos, civiles, culturales, artísticos, de vanguardia en el mundo, y resulta que lo primero y único que reciben es a Paris Hilton y de Inglaterra a Naomi Campbell.

No es causal, es un símbolo que marca una tendencia, un deseo profundo que viene de lejos, postergado mientras se pudiese vivir de otros mecenazgos.

Vaya embuste que es y fue la Revolución y sus dirigentes.

Me encantaría verles la cara ahora a los que gritaban desaforadamente golpeándose el pecho: ¡Socialismo o Muerte!, amenazando a todos aquellos quienes admirábamos de los países occidentales, sus derechos de expresión, de pluralidad, libertad cultural, ¿qué nos dicen ahora? ¿ que Paris Hilton es representante de los trabajadores explotados de los Estados Unidos, o una luminaria progresista o un icono de vanguardia contracultural?

En parte no niego mi satisfacción de que vayan mostrando sus inmundicias, las que siempre tuvieron y conocíamos muy bien, pero que mantenían semi ocultas ¿Cuál es el discurso ideológico ahora para alienar y alinear a los obsecuentes de la “izquierdosidad” (no confundir con el verdadero izquierdismo).

A raíz de la visita de estas luminarias norteamericanas e inglesa a La Habana para contribuir con un baño de cultura a la isla, la militante Naomi Campbell y la ilustre Paris Hilton, dos incansables luchadoras por los derechos civiles del hombre desposeído desde temprana edad en sus países, ejemplos culturales, artistas irreverentes de primera línea, revolucionarias en cuanto renglón se las analice, me han hecho recordar dos cositas.

Una que me sugirió la foto del festejo con algarabía incluida del primogénito de Fidel y la primogénita de Hilton, ex constructor del Hotel donde yo recalé en La Habana y viví tres años mitad tristes y mitad luminosos, es que ambos sienten orgullo de su inutilidad supina, de ser célebres únicamente por los desmanes o negocios de sus respectivos padres.

Y la segunda cosa que recordé, es que en Cuba el poder absoluto, la vida y la muerte de la gente, pertenecía a Fidel, el Ejército entero pertenecía a su hermano Raúl, la ganadería vacuna a su hermano mayor Ramón Castro, la Federación de Mujeres Cubanas, a la esposa de Raúl y cuñada de Fidel, Vilma Espín, el destino de la Física Nuclear lo dictaba el flamante admirador de Paris Hilton, Fidel Castro Balart, el hijo de Fidel, hoy el béisbol de todas la isla está a cargo de otro hijo de Fidel, el ejército estará dentro de no mucho a cargo de un hijo de Raúl y sobrino de Fidel, y para ponerle la tapa a la botella, incluso lo contestatario está en manos de ellos, la dirección de los grupos de LGTB, de la comunidad homosexual cubana está en manos de una hija de Raúl, aunque a mi juicio, ésta es más auténtica, podría estar en ese puesto también por méritos propios, pero no deja de ser una sobrina de Fidel y habría que ver como hubiese continuado su apuesta del lado de los marginales más denostados desde el machismo y la homofobia de la Revolución, una vez que hubiese recibido los primeros palos por defender tal desviación de la “hombría revolucionaria” como decía su tío.

Esto me lo recordó el hecho de que Fidelito fuese raudo a darle un abrazo a otra inútil hija de un poderoso,

Me pregunto cuántas monarquías, dinastías o dictaduras modernas, e incluso históricas, presentaron semejante panorama de una falta de pudor total, quizás haya que irse muy lejos en el tiempo, a la extensísima dinastía Ching para encontrar nepotismo de tal amplitud.

Raúl Castro, ¿el policía bueno?

Hace un año escribí este post y hoy me ratifico, con un añadido de arcadas y retorcijones de estómago por los poco aseados giros en la moral y las convicciones de los gerontes hermanos, emperadores de la magullada Perla del Caribe.

Creo que lo mejor que podía pasar en Cuba es lo que está pasando con los tímidos pero significativos cambios de Raúl, con algunas variantes que cualquier disertante introduciría desde luego, de cara a preparar a la población para los tiempos competitivos que más tarde o más temprano arribarán a la Isla, pero ello no dota al General de Ejército precisamente de autoridad moral para hacerlos, ya que Raúl no fue un disidente ni siquiera un actor más del proyecto marxista leninista, en el Buró Político ni en ninguna instancia de la “Involución”.

En su favor cuenta el hecho de que el contraste que existía entre las FAR, la cual era su coto experimental, y casi cualquier otra organización en cuanto a la adhesión de los pies en la realidad, en cuanto a simpatía reflejada en el afecto del pueblo, era algo palpable cada día, era frecuente ver un teniente coronel de las FAR durmiendo en una guagua de vuelta a casa absolutamente despreocupado de su entorno, incluso sintiéndose protegido, o en su side-car dando un aventón a cualquiera en el barrio, sin embargo ver lo mismo, incluso unos tres grados militares más abajo, en el MININT o en cuadros ministeriales o del PCC comportaba sencillamente una entelequia. Continuar leyendo

Fidel murió hace mucho tiempo

Ante los rumores insistentes de la muerte física de Fidel, debo decir que en mi criterio, aquel Fifo- Caballo-Guarapo-Esteban*,  temido por los suyos y admirado por sus ajenos, ya murió hace mucho tiempo.

Esa persona anciana balbuceante que queda abrazándose con cuanto Papas y bufón de alcurnia pase por Cuba, no es ni una tira de la uña del mejor conspirador en la sombra y púgil en distancias cortas que ha existido en la política latinoamericana en el siglo XX, y uno de los más temibles bichos de siempre. Aunque que nunca fue de nadie excepto de sí mismo, traicionó a toda ideología en que adscribió y a todo compañero a quien adocenó, desde José A. Echevarria, Eduardo Chibás, Frank País, Abel Santamaría, su hermana Haydeé, Osvaldo Dorticós, Huber Matos, Camilo, los cubanos que vivían en Miami exiliados de Batista, a quienes les pidió y de quienes recibió mucho dinero, todos los anarquistas, la mayoría de los comunistas previos al 59 del Partido Socialista Popular. Más tarde todos los “no comunistas” posteriores a 1961, luego todos los no seguidores de Nikita Kruschov del 65, como el caso de el Che.

Más tarde todo aquél que le decía que la zafra del 70 no tenía posibilidad de triunfar, como Orlando Borrego, era defenestrado, más tarde a todos los que decían que la zafra del 70 iba.

Primero a todo burgués, luego a todo proletario, luego a todo el que protestase porque los burgueses españoles, italianos, franceses y canadienses, se estaban comprando Cuba a golpe de dólar, la moneda enemiga, y los cubanos no podían siquiera acostarse en una habitación de un hotel de La Habana con aire acondicionado, ni una sola noche.

A los seriamente sospechados  por tener amaneramientos refinados, sofisticados, demasiado cultos, y duramente castigados y presos con trabajo forzado a quienes ostentaban una desviación de la conducta sexual, de la “hombría revolucionaria”.

A los reprimidos por disfrutar de gustos pequeño burgueses, o de las nuevas corrientes provenientes de afuera de Cuba, como el rock, el pop, el punk, la actitud contestaría.

Toda  la libertad de expresión durísimamente castigada, hasta penas altísimas de prisión.

Presos por tener dólares para comprarse un ventilador, un pantalón blue jean , un puerco, una caguama, y ni hablar de unos bistecs de vaca cuatrereada. Después pasó a ser enemigo de los que estaban en contra de que el dólar se legalizase, seguían reas personas porque se le encontraron 50 dólares, y Guarapo, que legalizó de la noche a la mañana la tenencia de dólares, no pidió perdón a nadie por el dolor que causó, ni siquiera se planteó soltar a los que estaban en prisión defendiendo sus postrimerías por tal afrenta igual de caprichosamente castigada que luego derogada.

Fidel, quien se abrazó con los ortodoxos, los jesuitas, los norteamericanos, los burgueses cubanos de donde provenía su esposa Díaz Balart y todos sus amigos, luego con los comunistas pro URSS y anti guerrillas, luego los demócratas latinoamericanistas, los religiosos del Tercer mundo, luego con la dictadura argentina, con Videla, con Galtieri, con Costa Méndez por orden de la URSS, luego con los reyes de España, con el Papa polaco anti comunista que derribó el comunismo mundial, con Arafat, con Jomeini contra Saddam Hussein, al poco tiempo con Saddam Hussein contra Bush padre. Luego con un revisionista dicharachero como Chávez.

Y para terminar, con Estados Unidos, entregando la pantomima de la Revolución Involutiva para comenzar un Capitalismo de partido único.

Un hombre que hizo bandera de la medicina cubana, y cuando se enfermó que vio las orejas al lobo, no reparó en gastos y se hizo traer a una eminencia del Hospital Gregorio Marañon, “español no cubano”.

Un tipo que no reparó en gastos mientras su pueblo carecía de todo, por vivir un día más, todo tipo de cuidados, lo que sea para no morir, el deseo de vivir hasta la eternidad contrapuesto a la actitud de todo guerrillero valiente.  Viajaba con quinientos guardaespaldas.

Hablo de Guarapo, quien se construyó su Choza vivendi, en el sitio más exclusivo de toda Cuba, y uno de los más exclusivos de América, donde estaba el hoyo 14 del campo de Golf del Club de los ciudadanos más suntuosamente ricos de Cuba, el Havana Biltmore Yatch and Country Club, en Jaimanitas.

Un Guarapo que tenía casas por toda la isla, a quien la isla le pertenecía, un Fidel-Guarapo que tenía colecciones de yates a su disposición, y dos en exclusiva, no en propiedad como es todo en Cuba como coartada para que no se los pueda acusar de acaparadores capitalistas, pero con mucho más poder que cualquier capitalista en su país.

Yates para cazar y pescar, con amigos multimillonarios, no con revolucionarios luchadores del mundo. Donde le cocinaba langosta a Depardieu, a García Márquez, a Maradona, de quien llegó a la desfachatez de decir que era el “Che Guevara del deporte”, sin juzgar al astro futbolista, sino comparando con lo que le caía en Cuba a alguien homologable. Hay que decir que en Cuba quien fuese sorprendido fumándose un porro de marihuana, si no era hijo de dirigentes, era encarcelado por cinco años, y si a un deportista de elite lo cogiesen con un kilogramo de cocaína, es harto difícil imaginar el nivel del castigo que le aplicarían por traición al Comandante.

Amigo y defensor de capitalistas como Meliá, o similares europeos y canadienses. Empresarios igualmente exploradores que los cubanos  a quienes habían echado de Cuba, y que encima no eran ni cubanos.

Guarapo-Fidel,  quien visitó la tierra de su padre, Galicia, no de la mano de algún republicano revolucionario anti-fascista, sino  precisamente de mano del mayor fascista y racista que quedaba vivo en la democracia, el franquista y anti-comunista Manuel Fraga, con quien anduvo durante días comiendo abundantemente, bebiendo ron a voluntad y jugando dominó,

Guarapo no llega triunfante de nada al final de su vida.

Como no llegaron Pinochet o Franco, aunque hayan muerto tranquilos en su cama.

Y aunque yo no sea revolucionario, no puedo menos que reconocer que tanto Camilo, Frank País, Che, Santamaría, Mella, Villena, Guiteras, Lenin, Marx, cualquiera caído en Angola, Etiopía, o Mozambique, y todos los disidentes y todos los fusilados, los enloquecidos, los ahogados, los exiliados, los expulsados, los humillados cubanos, murieron, pero sobre todo vivieron con mucha más dignidad revolucionaria que el amortizadísimo Guarapo-Fifo-Caballo- Esteban*.

* El cubano de a pie siempre jocoso, le llamaba Esteban a Fidel, por “Este-bandido” salvando así la rigurosísima censura.

El ron y la coca cola se extrañaban

Durante mucho tiempo se habían llevado excepcionalmente bien. Se profesaban cariño pero sobre todo se necesitaban. Tras un percance tormentoso estuvieron un largo período de tiempo separados. 

Por un lado iba la Coca Cola presumiendo de ser más saludable y seria que el ron. Por el otro iba el ron encargándose de la fiesta, vanagloriándose de su creatividad y su libertad.

Alejados uno del otro tejieron sus historias, hubo pequeñas y grandes traiciones, sucedáneos de amoríos, escándalos, rupturas y más traiciones. Nunca fueron del todo felices en aquél distanciamiento.

Este 17 de diciembre, día de la deidad Babalú Ayé del panteón afrocubano o de su equivalente cristiano San Lázaro, a expensas y gracias en gran parte al aporte del hielo, que ofició como concienzudo mediador, decidieron escenificar un aparcamiento de las diferencias, y se acercaron para sumergirse juntos en el trasluz de un vaso por primera vez en muchos años. Continuar leyendo