Las Malvinas vuelven a la ONU

La liturgia diplomática sobre el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas, Sándwich del Sur y Georgias del Sur vuelve al ritual anual del Comité de Descolonización de Naciones Unidas a medio siglo de la primera resolución adoptada por la Asamblea General. Fue el 16 de diciembre de 1965 cuando, por mayoría y sin ningún voto en contra, se reconoció de manera “formal y expresamente” la existencia de la disputa de soberanía entre Argentina y el Reino Unido y se instó a estas dos únicas partes a encontrar una “solución pacífica, a la mayor brevedad, a través de negociaciones bilaterales y teniendo en cuenta los intereses de los habitantes de las islas”. El conflicto de 1982 no alteró la naturaleza de la controversia, que continuó pendiente de negociación y de solución, tal como lo reconoció la Asamblea General de la ONU ese mismo año. Continuar leyendo

Preocupa a Obama el futuro del Reino Unido

La reciente visita del Presidente de Estados Unidos a Europa ha tenido un acento inédito al incursionar en algunas incógnitas sobre el futuro del Reino Unido. Por un lado, ha destacado insistentemente la importancia que reviste para Washington que el aliado histórico principal no deje de ser miembro pleno de la Unión Europea. Por otro, se mostró contrario a la independencia de Escocia que desmembraría una parte significativa de la Gran Bretaña conocida.

El énfasis pone de manifiesto la importancia que revisten ambas cuestiones en el pensamiento estratégico norteamericano. Ambos temas, que se resolverán por consulta popular, son percibidos como afectando la fortaleza y credibilidad de Londres como potencia europea y, en particular, el papel que ha ejercido de articulador pro americano en Europa. Ningún otro lo podría reemplazar con el mismo carácter, ni siquiera Francia.

Continuar leyendo

Armas nucleares: el Consejo de Seguridad debería dar el ejemplo

El acuerdo nuclear preliminar con Irán, más allá de las ambigüedades y limitaciones, es políticamente importante por representar un impasse de confrontación regional pero dista de la euforia con la que ha sido anunciado y recibido. Eso es así básicamente por dos circunstancias.  Por un lado, ha expuesto la potencial capacidad nuclear militar de Irán en materia de uranio enriquecido como de la intención de producir plutonio. Por otro, el carácter transitorio del arreglo diplomático presupone complejas negociaciones adicionales para intentar concluir un acuerdo que sea significativo en términos de asegurar que no posea en el futuro material fisionable para producir un arma nuclear. Por el momento, ese no es el caso.

El comunicado conjunto firmado en Ginebra el 24 de noviembre se refiere al acuerdo como un “primer paso” y “plan conjunto de acción” que establece “un proyecto hacia una solución integral a largo plazo”. Es decir, se trata de un esquema provisorio de fomento de la confianza y de expectativas diplomáticas. De hecho, las obligaciones que se derivan del acuerdo están planteadas en términos de “medidas voluntarias”. También reversibles.

Continuar leyendo

Siria: las otras armas prohibidas

La incorporación de Siria al régimen de prohibición de las armas químicas no ha detenido el uso inhumano de otras armas prohibidas. Recientes anuncios dan cuenta del uso de las llamadas bombas racimo que actúan de forma indiscriminada afectando de manera inaceptable la vida de civiles. El peligro radica en ser un artefacto contendedor que puede ser lanzado desde tierra, aire o mar y que al abrirse durante la trayectoria expulsa entre varias docenas o cientos, según el modelo, de submuniciones o minifragmentos que estallan cuando tocan el suelo aunque en un 30% de los casos se transforman en minas que se entierran o permanecen en la superficie. El desastre humanitario que ocasionan es peor a las minas terrestres tradicionales.

La Convención sobre Municiones de Racimo, adoptada en Irlanda en mayo del 2008, significó un avance de desarme humanitario de enorme significación aunque lamentablemente no ha logrado el objetivo de la universalidad y es quizás por ello que no se ha producido una reacción internacional categórica de condena del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas contra el régimen de Al Assad por el uso inhumano de este tipo de armamento. En total, 112 países se han sumado a la Convención con las notables ausencias de Estados Unidos, Rusia y China.

Continuar leyendo

Siria: Argentina decepciona en el Consejo de Seguridad de la ONU

El uso de armas químicas en Siria, según la denuncia de Médicos sin Frontera con la muerte por asfixia y otros efectos tóxicos de más de un millar de personas, podría ser el germen de una guerra de dimensiones regionales y graves consecuencias internacionales para la paz y la seguridad internacional. El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que preside Argentina en el mes de agosto, se ha reunido en varias ocasiones sin mayores resultados por las diferencias entre las principales potencias. La Argentina, sin embargo, en ningún momento adoptó la iniciativa de convocar una sesión de emergencia del citado órgano frente a los graves hechos denunciados, que son investigados por un equipo técnico enviado por el secretario general de la ONU, sino que las reuniones tuvieron que ser solicitadas expresamente por Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Corea del Sur y Luxemburgo.

Tampoco ha sugerido un curso de acción diplomática para romper el impasse, pese a la reciente presencia de la presidenta de la Nación al inaugurar la presidencia argentina al único órgano multilateral con la responsabilidad primordial de preservar la paz y la seguridad internacional. La pasividad argentina, en ese contexto, es interpretada como un apoyo a la visión reticente de Moscú al tratamiento de la cuestión como a la insistencia que las armas químicas fueron lanzadas desde posiciones ocupadas por las fuerzas opositoras al régimen de Al Assad. Ya hace aproximadamente un mes, en oportunidad de la visita a Buenos Aires del canciller ruso, Serguei Lavrov, la Argentina había firmado un comunicado conjunto en el que avalaba esencialmente la posición de Rusia en el conflicto sirio. El comportamiento de la Argentina en el Consejo de Seguridad, que podría calificarse de burocrático, podría obedecer a las coincidencias con Moscú contenidas en ese documento.

Continuar leyendo