Con el reciente fallecimiento de Hugo Chávez, luego de una larga agonía, se abre un nuevo interrogante. El chavismo ¿sobrevivirá a su líder y se consolidará como un fuerte partido político de gran adhesión popular, como lo hiciese el peronismo en la Argentina, o desaparecerá y morirá con su líder?
Una nueva etapa comienza en la historia de Venezuela que podría asemejarse a la propia historia argentina luego de la muerte del general Juan Domingo Perón. Si bien ambos no son contemporáneos, sus historias se asemejan bastante, y podrían servir de indicio con respecto al futuro venezolano.
Ambos fueron políticos, militares y presidentes de sus respectivas Repúblicas por tres períodos, no habiendo sido superados por ningún otro presidente en la historia de sus países. Fueron derrocados en ejercicio de sus mandatos presidenciales. En el caso del general Perón, con el golpe militar de 1955 -conocido como la Revolución Libertadora-, interrumpiendo su segundo mandato y obligándolo a permanecer en el exilio durante 18 largos años. En el caso de Chávez, por un golpe de Estado llevado a cabo en 2002, cuando fue derrocado por el industrial venezolano Pedro Carmona, y restituido luego de dos días por un contragolpe de las Fuerzas Armadas Venezolanas.
Ambos estuvieron presos antes de llegar a ser presidentes. El general Perón en octubre de 1945, cuando fue retirado de sus puestos políticos durante la presidencia de Edelmiro Farrell y encarcelado en la isla Martín García. Chávez, por dos años, luego de un intento de golpe militar en 1992, para derrocar al presidente Carlos Andrés Pérez.
Ambos lideres reformaron las Constituciones de sus respectivos países. Perón en 1949 y Chávez en 1999, modificando las leyes electorales, ampliando derechos laborales y sociales, y sentando bases jurídicas para expropiar a las grandes empresas monopólicas.
Chávez ganó su tercer mandato con el 55% de los votos; Perón ganó su tercer mandato con el 62% de los votos. Ambos murieron al poco tiempo de ser electos, lo cual los transforma, de alguna manera, en mártires políticos. Chávez luego de una intensa lucha contra el cáncer, la batalla más dura que le tocó pelear y que no pudo ganar. Perón, de un ataque cardíaco, producto del agravamiento de una cardiopatía isquímica crónica. La historia nos demuestra como los pueblos tienden a idolatrar a sus mártires y transformarlos en aún más grandes de lo que fueron. Se resaltan sus virtudes y disipan sus defectos.
Siguiendo con esta línea de pensamiento y habiendo sido ambos tan populares y queridos, si la historia se repite en Venezuela, el chavismo como partido político tendrá un gran futuro. Desde la muerte del general Perón y la vuelta a la democracia en nuestro país en 1983, el peronismo ha tenido un rol preponderante en nuestra política.
De 1983 al día de la fecha el peronismo gobernó la Argentina durante 22 años. Tenemos los dos gobiernos de Menem (1989-1999), Duhalde (2002-2003), seguido por Néstor Kirchner (2003-2007), sucedido por los dos mandatos de Cristina Fernandez de Kirchner ( 2007-2015). Sólo 10 años el poder estuvo en manos no peronistas. Y estos presidentes no peronistas no pudieron completar sus mandatos debido a severas crisis económicas seguidas por descontento y disturbios sociales que los obligaron a adelantar elecciones en el caso de Raúl Alfonsín ( 1983-1989), o a simplemente retirarse, como lo hiciera Fernando De la Rua (1999-2001).
El misterio no tardará mucho en develarse ya que Venezuela deberá llamar a elecciones y allí se definirá su destino. Si Maduro gana, quedará consolidado el chavismo como fuerte poder político. Pase lo que pase, Chávez ya tiene garantizado su lugar en la historia.