Mercados emergentes como América Latina están modificando los centros de influencia de Internet, tanto social como económicamente y creando nuevas oportunidades de crecimiento y desarrollo.
Desde los inicios de Internet, los países desarrollados fijaron el estándar en cuanto a su contenido y funciones, aprovechando sus beneficios económicos. Sin embargo, a medida que mercados emergentes densamente poblados de todo el mundo se suman a la web, el centro de gravedad de Internet se ha ido desplazando, y es probable que algunos lugares cambien -o que la propia Internet cambie- tan rápidamente o de manera significativa como sucede en América Latina.
Internet está nivelando el campo de juego en las economías emergentes, con su capacidad como ecualizador social, creando nuevas oportunidades para el crecimiento y el cambio. Con una amplia gama de países altamente poblados que crecen económicamente en medio de la adopción de la tecnología móvil y de Internet, el crecimiento de América Latina no sólo será transformador a nivel interno y económico, sino que, junto con otros mercados emergentes, dará forma y dirigirá la Internet del futuro.
Eric Schmidt y Jared Cohen de Google señalan en su libro recientemente publicado La nueva era digital: remodelación del futuro de los pueblos. Naciones y negocios, que Internet trae consigo algunos desafíos inevitables que están modificando el futuro de nuestro mundo (infraestructura, la naturaleza de límites virtuales, la privacidad, la política y la seguridad, por nombrar sólo algunos), pero también presentan oportunidades antes impensables y es nuestro objetivo aprovecharlas. La transformación de las empresas, las economías y las sociedades es inevitable, pero podemos orientar esta transformación en buenas direcciones, si estamos dispuestos a ser creativos y proactivos.
En lo que respecta a América Latina, la región ha sido de interés para promotores externos e internos por varias razones, incluyendo sus recursos naturales, la resiliencia y el crecimiento de sus mercados durante la desaceleración mundial, los años de crecimiento explosivo en Brasil y el crecimiento sostenido y con buenas perspectivas de México y otras regiones, así como sus recursos económicos y humanos muchas veces desaprovechados.
El crecimiento de Internet en América Latina ha sido rápido, pero continuará en expansión. Aunque el crecimiento de la población de Internet está llegando a su punto de saturación en los Estados Unidos y en muchos países de Europa, en América Latina el impacto social y económico de esta nueva presencia en la web está recién empezando a hacerse sentir.
De hecho, en los últimos años, la población de Internet en América Latina creció más rápido que cualquier otro lugar del mundo. Con aproximadamente 2,5 millones de usuarios de Internet, según Internet World Stats y un 43% de la población latinoamericana conectada en el 2012.
A medida que el resto de la población se sume a la web, las regiones en desarrollo deben apresurarse para garantizar el apoyo necesario para el crecimiento del negocio relacionado con Internet incluyendo mejorar la infraestructura y ancho de banda, limitar los problemas de seguridad y política de la información y la reducción de costos para las empresas y los individuos.
Las grandes empresas, por supuesto, ya están en la web y están haciendo un uso cada vez más sofisticado de las herramientas y servicios de Internet, incluyendo cloud computing, que IDC estima que seguirá creciendo a un 70% anual en América Latina entre 2012 y 2016. Por otra parte, el desarrollo empresarial en la región aún experimenta algunos beneficios interesantes de la relativa falta de tecnología heredada y la infraestructura – a menudo puede avanzar más rápido, establecer nuevos estándares y aprovechar los beneficios económicos más rápidamente.
Las empresas están llegando cada vez más a los consumidores latinoamericanos a través de la web y a su creciente poder adquisitivo – el gasto en publicidad en línea previsto en 2013 era de 4.400 millones al año, de lo cual mucho sería en Brasil, de acuerdo con la estimación de eMarketer – aunque el gasto aún es menor al de la televisión y necesita aumentar rápidamente para alcanzar a la población efectivamente.
Los latinoamericanos en línea son un mercado receptivo: ya son usuarios frecuentes de los buscadores de Google, son entusiastas con los anuncios de vídeo, se unen a sitios de entretenimiento como YouTube, en números cada vez mayores, y están participando cada vez más en el comercio electrónico, que tenía un crecimiento bienal del 98,5% en 2011. Esto presenta oportunidades para las empresas de todo el mundo para hacer crecer sus bases de consumo en América Latina y para las empresas latinoamericanas de todos los tamaños para iniciar, desarrollar o llegar a nuevos mercados y crecer..
La presencia en Internet de América Latina ya es única en varios aspectos. A pesar de ser algo nuevo para la población, es ultra-social (de hecho, en la región se presentan cinco de los mercados más comprometidos de redes sociales en todo el mundo) y ultra-móvil. Al igual que en otras partes desarrolladas del mundo, los teléfonos inteligentes son a menudo el principal medio de acceso a Internet para los latinoamericanos. Con una de las tasas de adquisición de móviles más altas del mundo, el uso de teléfonos inteligentes está creciendo de manera constante, haciendo de América Latina una creadora de tendencia para la Internet del futuro más versátil y móvil.
Es evidente que el crecimiento explosivo de la web y los nuevos paradigmas de uso están creando un nuevo mundo de posibilidades on line en América Latina. A medida que la tendencia hacia la movilidad continúe, todo estará cada vez más inter conectado – y todo el mundo estará más dispuesto a trabajar, socializar, jugar, ir de compras, actuar, reaccionar o interactuar en cualquier momento. Las pautas para la web del futuro, y la economía de Internet del futuro, se están desarrollando en estos momentos. Para las empresas y anunciantes, regionales o mundiales, con un interés en llegar a la población de consumidores de América Latina de manera relevante y convincente, el momento de actuar es ahora.