Por: Gabriela Adamo
Este año celebramos el Capítulo 40 de un evento muy especial para la Ciudad y el país entero, la Feria del Libro. Nació del entusiasmo de un escritor, Roberto Castiglioni, acompañado por un puñado de editores: los responsables, en aquel momento, de casas como Corregidor, Emecé, Sigmar y Sudamericana. A pesar de las dificultades políticas, sociales y económicas, la Feria fue creciendo, duplicando año a año su convocatoria de público, hasta que –en el 2000- tuvo que mudarse a un predio más grande, La Rural, donde se sigue realizando hoy en día.
La nómina de autores que la visitaron es francamente impresionante: Camilo José Cela, Nicanor Parra, Italo Calvino, Doris Lessing, Marvin Minsky, Paul Auster, J.M. Coetzee, Muhammad Yunnus, Ray Bradbury, Augusto Roa Bastos, Mario Vargas Llosa, José Donoso, Carlos Fuentes, Angeles Mastretta, Rosa Montero, Juan José Millás, Eduardo Galeano, Mario Benedetti, y podríamos seguir completando páginas enteras. Sin dejar de mencionar, desde ya, a los autores argentinos, que tienen una relación entrañable con este espacio que consideran, en su mayoría, como un inmejorable punto de encuentro con sus lectores. Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares vinieron casi todos los años; Juan José Saer y Griselda Gambaro dieron discursos inaugurales; Ricardo Piglia y Claudia Piñeiro están presentes en todas las ediciones; David Viñas y Marcelo Cohen son dos de los ganadores del Premio de la Crítica, así como Gloria Casañas obtuvo el primer Premio del Lector en el 2012. Hoy en día, centenares de jóvenes escritores pasan por las salas y las conversaciones que se generan en la Feria, alimentando su producción y enriqueciendo la experiencia de los lectores.
En 1978 se creó la Fundación El Libro, institución destinada a afianzar el lugar de la Feria en la sociedad argentina. Tiene la particularidad de estar conformada por varias cámaras y asociaciones que, en conjunto, representan al sector editorial nacional completo: escritores, editores, imprenteros y libreros. Esto le da una gran solidez y garantiza un cuidado equilibrado de todos los sectores ligados al libro. Esta Fundación nació con el objetivo de promocionar el libro y la lectura en todo el país.
Por supuesto, la Feria fue cambiando y adaptándose a las nuevas necesidades del público. Los grandes ejes temáticos de la primera década (Ferias enteras dedicadas a un solo tema, como el Martín Fierro o la dramaturgia) fueron cediendo el paso a encuentros mucho más amplios, en los que conviven decenas de estímulos y puntos de interés. Hoy en día hay espacios para niños, como el Patio Infantil –con una biblioteca especializada y un programa que busca acercar los libros a los más chicos-, espacios dedicados a la divulgación científica –Zona Explora- o a la experimentación en nuevas formas de narrar y leer –Zona Futuro. Se mantiene el Espacio Digital, donde los visitantes pueden usar e-books y leer online, y se suma una novedad, el Espacio Libro, en el que se podrá ver cómo se hace un libro (desde la escritura hasta la impresión) y aprender sobre la historia de la lectura desde las tabletas babilónicas hasta la actualidad.
Queremos que cada lector encuentre lo que le interesa, por eso hay ciclos específicos como Milhojas (dedicado a los libros gastronómicos), un Encuentro de Narradores Orales, Jornadas para Educadores y mesas sobre deportes, humor, música y mucho más. También nos importa aportar en forma activa a una mejor circulación de los libros por todo el área de habla hispana, lo que nos lleva a organizar por tercera vez consecutiva el Diálogo de Escritores Latinoamericanos, y fortalecer el conocimiento de lo que se escribe en el interior del país, a través del primer Diálogo de Provincias. Todo esto se puede encontrar en la página web de la Fundación, que este año ofrece un programa online actualizado y de muy fácil uso, acompañado de una aplicación que se puede bajar a cualquier teléfono o dispositivo móvil.
Este resumen –hay más de mil actividades previstas durante la próxima Feria- deja en claro la vitalidad y riqueza del festival más importante en torno al libro de toda América Latina y España. Para nosotros es motivo de alegría y de orgullo, y esperamos que vengan a festejar este cumpleaños muy especial que, sin lugar a dudas, pertenece a todos.