La insinuación y la confirmación de que el Banco Central de Estados Unidos reducirá gradualmente las compras de bonos y aumentará la tasa de interés causó volatilidad en los mercados mundiales. La semana pasada, después de la conferencia de prensa trimestral del presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke, cayeron los mercados de acciones, aumentó el rendimiento de los bonos, declinaron los precios de muchas materias primas y los capitales comenzaron a salir de los mercados emergentes.
Durante la conferencia de prensa, Bernanke reveló las condiciones bajo las cuales ocurrirá el cambio de política. Dijo: “si las cosas empeoran, haremos más, si las cosas mejoran, haremos menos”. Las últimas proyecciones sobre la economía estadounidense revelaron la expectativa de la Reserva Federal de que, en 2014, el crecimiento económico alcanzará entre 3 y 3,5 %, mientras espera que el desempleo disminuirá a 7 %. En ese caso, el banco central reducirá gradualmente, hacia fines de 2014, las compras de bonos del Tesoro y de valores garantizados por hipotecas. Además, la proyección es que el desempleo caiga debajo de 6,5 % hasta 2015. Por ende, la tasa de interés de los fondos federales se mantendrá cercana a cero durante casi todo ese año.
Eso también significa que Bernanke no participará en la adopción de dichas decisiones, porque su mandato expira el 31 de enero de 2014. En reciente entrevista televisada, el presidente Barack Obama dijo que el presidente de la Fed “se quedó mucho mas de lo que quería o de lo que se suponía.”