Plan industrial 2020, un inexplicable olvido

Luis Dambra

El plan estratégico industrial 2020 fue anunciado por la presidente y su ministra de industria con bombos y platillos, con un objetivo de alcanzar la duplicación del PIB, aumentar la inversión del sector industrial, y crear trabajo entre otras metas. Para ello, luego de un exhaustivo trabajo federal, se identificaron once cadenas industriales de valor: alimentos; calzado; textiles y confecciones; madera; papel y muebles; materiales de construcción; bienes de capital; maquinaria agrícola; autos y autopartes; medicamentos; software y por último productos químicos y petroquímicos.

Me pregunto, ¿por qué no figura la minería?

Antes de hacer cualquier análisis de la industria minera cito las palabras del Papa Francisco en el libro El Jesuita : “En el día del juicio delante de Dios, nos contaremos entre los que enterraron el talento dado y no lo hicieron fructificar. No sólo en agricultura y ganadería, sino también minería. La riqueza minera de la Argentina es impresionante”, convalidando estas declaraciones la Argentina está considerada entre las 10 potencias geológicas del mundo, es un jugador relevante en materia de reservas, en litio está 3, cobre 4,  plata y boro 7, potasio 8 y oro 9.

Revisando el desempeño de la industria podemos ver que: La inversión extranjera directa orientada a minería creció un 47 % entre 2007 y 2011, concentrando en el 2012 el 40% del flujo total de inversiones en el país.

La minería como generadora de divisas creció un 425% entre 2003 y 2011 llegando a 5268 millones de dólares, aportando un 6,27%  del total de las divisas generadas, creo empleo directo con una tasa de crecimiento del 7,7% promedio anual, ubicándose por encima del promedio de la industria, ocupando en forma directa e indirecta a 77284 personas.

Los proyectos de inversión en marcha en el momento que se hizo el plan 2020 sumaban cerca de 20726 millones de dólares, significarían a 2016 una generación de empleo que llevaría la industria a ocupar en forma directa e indirecta a cerca de 132000 personas con un crecimiento de 72% en la fuerza laboral ocupada, aumentando la participación en el PBI del 1,1% al 2,1% en 2016.

Ahora bien si nos comparamos con Chile que comparte la misma cordillera con nosotros, ocupan en forma directa a 232.000 personas lo que significa por efecto multiplicador una ocupación de  cerca de 1.000.000 personas, generando un PIB del 16% del PIB Chileno, como podemos apreciar, nuestra industria minera no se encuentra nada bien, claro está Chile es líder mundial en cobre, nitratos, yodo, renio, y litio, mientras que son el 3er productor mundial de molibdeno, y 5º productor mundial de plata.

El plan 2020 quiere duplicar PBI, quiere crear puestos de trabajo y generar divisas, pero desconoce a una industria que podría aportar mucho a la meta propuesta.

Ahora estamos blanqueando para conseguir inversión, ¿y si alentamos la inversiones en minería responsable/sustentable? ¿No sería mejor?

Perdamos el miedo a la minería, se puede hacer con responsabilidad, hay algunas provincias argentinas que lo están haciendo junto con empresas responsables.

Como dice el Papa Francisco, no enterremos los talentos, nos juzgarán por ello.