Las exportaciones de armas convencionales siguen siendo el mejor negocio comercial a nivel global. Las ventas mantienen una preocupante tendencia ascendente desde el 2004 y se incrementaron en un 14% en el período 2011-2015. De acuerdo con el Instituto de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), en el 2015, Estados Unidos ha seguido liderando el mercado de armamentos con un 33% de ventas, seguido por Rusia, con 25% del volumen total.
En la actualidad, seis de los diez principales exportadores de armas son asiáticos (India 14%; China 4,7%; Australia 3,6%; Pakistán 3,3%; Vietnam 2,6% y Corea del Sur 2,5%), lo que pone en evidencia una diversificación de preferencias de suministro tanto por consideraciones políticas como tecnológicas. Europa ha dejado de ser en muchas regiones del mundo fuente principal de abastecimiento militar.
El informe del SIPRI refleja que las mayores ventas de armas del 2015 han sido a Medio Oriente y al norte de África, con un crecimiento del 61% en los últimos cinco años. Arabia Saudita ha sido el mayor importador mundial, con un aumento del 275% en relación con el período 2006-2011. Entre 2011 y 2015, las compras de Qatar crecieron un 279%, de Emiratos Árabes un 35%, de Egipto 37%, de Argelia y Marruecos un 20%, respectivamente. Las adquisiciones de Irak aumentaron un 81% en el 2015. SIRPRI no ha logrado confirmar las ventas de Rusia a Siria en el 2015, aunque se calcula que han crecido en no menos de un cincuenta por ciento.
Los datos indican que el liderazgo de Estados Unidos en el mercado mundial de armas convencionales se mantiene en general estable, aunque las exportaciones de grandes armas y material pesado crecieron un 27% en los últimos años y la industria militar norteamericana tiene pedidos significativos pendientes, entre otros, de 611 aviones de combate F-35 para nueve Estados que incluyen a India y Japón. Asimismo, en el último año ha realizado transferencias de armamento a 96 países, entre los que se destacan, por el volumen de ventas, Arabia Saudita, Corea del Sur, Australia y Emiratos Árabes.
China, pese a que representa ventas de aproximadamente el 5% del mercado global, es, según SIPRI, un proveedor de armas en crecimiento y ya exporta a 38 países, entre los que se destaca la venta de tres fragatas a Argelia y de drones a Nigeria. En los últimos cinco años, las exportaciones han crecido en más de un cien por ciento, principalmente al mercado asiático; el 68% se distribuye entre Pakistán, Bangladesh y Birmania.
Los proveedores europeos, en cambio, han ido perdiendo posiciones en el mercado global, en particular el Reino Unido, que ha desaparecido de la lista de los cinco grandes exportadores de armas. Francia mantiene presencia, entre otros, con la industria naval y el avión de combate Rafale.
De acuerdo con el SIPRI, en el 2015, tres países de América Latina han sido los principales compradores de armas: Brasil, México y Venezuela. Las importaciones de armamento de México crecieron un 300% en el período 2011-2015, si se compara con los datos del 2006 al 2010. Sin embargo, Venezuela sigue siendo el mayor comprador de armas de la región en la última década. El principal proveedor venezolano ha sido Rusia, con un 78% de las ventas, seguida por China, España y Países Bajos.
Estas referencias del SIPRI son útiles como termómetro del clima internacional imperante. La información pone en evidencia el grado de tensión, así como la importancia de que la comunidad internacional inicie a la brevedad la negociación de tratados de limitación de armamentos como contribución a la paz y a la seguridad internacional. Es hora de que eso ocurra.