Por: Santiago Maggi
Después de un mes glorioso como lo fue octubre para los mercados financieros, donde el S&P 500 logró generar un retorno total de 4,59% en medio de tanta incertidumbre sobre el futuro financiero y económico de los EEUU, los inversionistas se posicionan para cerrar libros con un exitoso 2013.
Después que el desacuerdo político y el riesgo de un cese de pagos en EEUU llevara a los participantes de los mercados a creer que la Fed tendría menos incentivos para empezar el proceso de estrechez monetaria, los participantes enfrentaron confusión después que en las minutas de la Fed los miembros de la junta directiva se pronunciaran más optimistas sobre las perspectivas económicas, y por ende, un proceso de estrechez podrían estar más cerca de lo esperado.
Sin embargo, aunque la Fed sea más optimista de lo esperado, es claro que esta tiene que esperar primero a los datos disponibles sobre los efectos de la discusión en Washington en la economía, y tales datos no estarán disponibles sino en el transcurso del mes de noviembre. Además, el reciente señalamiento de Yanet Yellen como presidenta de la Fed genera menores incentivos en el interior de la institución para generar un cambio tan crítico en la política monetaria.
Los reportes de utilidades de las empresas del S&P 500 han empujado al alza el capital del sector corporativo luego de que la mayoría de empresas superaran las expectativas del mercado en las proyecciones de crecimiento del sector. Estos reportes seguirán saliendo durante todo el mes de noviembre, siendo la próxima semana la de mayor número de empresas que reportan este mes.
Es cierto que noviembre podría no ser un mes tan efusivo como lo fue octubre por simple sobrecompra en el corto plazo, pero por el momento, los contingentes no tienen la suficiente fuerza para frenar el buen desempeño del mercado accionario estadounidense, y cerrar el año siendo uno de los mejores años en la última década.