Por: Santiago Maggi
En EEUU hay una razón más para celebrar el Día de Acción de Gracias: los retornos del mercado accionario. A menos de 30 sesiones de mercado abierto para cerrar el año, los principales índices se han apreciado 30% en el 2013, un retorno envidiable para cualquier proyecto de inversión.
Sin embargo, dicha celebración también es un llamado de atención para redefinir nuestras inversiones en el 2014.
El 2013 es un año para celebrarlo al máximo mientras no sea cosa del pasado, pues por simples promedios históricos, es poco probable que volvamos a ver un año como éstos. En los últimos 10 años, el retorno total promedio (i.e., incluyendo dividendos) en los últimos 10 años ha sido 7,4%; en los últimos 20 años, el retorno total promedio ha sido 9%.
Además, el 2014 enfrenta puntos de inflexión en la dinámica fundamental de los últimos cinco años, siendo la variable de liquidez monetaria el principal factor decambio. Muchos analistas se preocupan por tratar de identificar cuál será el mes en donde la Reserva Federal empiece el proceso de reducción monetaria, pero lo que es verdaderamente importante es entender que el mercado accionario puede descontar antes la decisión de la FED, y dicho descuento puede tener implicaciones importantes en nuestras inversiones antes de una oficial decisión.
Un punto de inflexión evidente probablemente se genere en las tasas de interés, pues las tasas de mediano y largo plazo tienen alta chance de entrar en un período de normalización, que a su vez podrían implicar un cambio de tendencia de tasas en caída a subida de tasas. El mercado accionario probablemente podría tener un ajuste después de que el combustible de su tendencia alcista sea mitigado por primera vez en cinco años. Estos puntos de inflexión, aunque puede que no sucedan a una velocidad dramática, o no veamos correcciones significativas, sí implican un cambio de mentalidad a la hora de diversificar los portafolios.
Además, cambios como éstos no necesariamente implican reducir posiciones en activos que tienen alta probabilidad de perder su valor, pero sí rediseñar definitivamente la estrategia de inversión. Por ejemplo, en el ámbito del mercado accionario, tiene bastante sentido buscar estrategias que no sólo se beneficien en la apreciación de los activos, sino también en la caída, o identificar sectores que pueden beneficiarse más que el mercado accionario agregado.
El 2014 será un año desafiante para los generadores de retorno, pero con grandes oportunidades para los que apliquen las estrategias correctas.