Por: Santiago Maggi
Comenzó el 2014 con un reporte de trabajo sorpresivamente decepcionante (74 mil trabajos creados en diciembre de 2013 vs. 197 mil estimados), dejando un mensaje confuso sobre el progreso económico en la primera economía, y sorteando la incógnita de si la Reserva Federal (FED) persistirá con su reciente campaña política monetaria restrictiva.
Analizando los resultados de las cifras de trabajo, observamos que estos resultados no necesariamente son suficientes para “doblarle el brazo” a la FED en la continuación de su política restrictiva. Por una parte, el promedio mensual de trabajos creados en los últimos tres, seis, y doce meses se encuentra por encima de 150 mil trabajos, siendo este el promedio necesario para mantener la tasa de desempleo estable.
Por otra parte, las cifras de trabajo en las que se basó la FED para comenzar el “tapering” han sido cifras rectificadas al alza; en octubre y noviembre, fueron creados 38 mil trabajos más de los que se reportaron inicialmente.
Se cree que el fuerte invierno en los EEUU pudo ser uno de los factores principales del bajo número de nóminas, siendo éste un evento netamente cíclico y de poca duración. Además, el número de trabajos es en su naturaleza volátil, pues tiene un margen de error mensual de más o menos 90.000 trabajos.
Sin embargo, el verdadero reto para la FED será la interpretación en la caída en la tasa de desempleo, y sus implicaciones sobre momento en que se deben aumentar las tasas de interés. Diciembre dejó en evidencia que la caída de 7,0% a 6,7% en el desempleo no fue por creación de trabajos, sino por la caída en la tasa de participación en el mercado laboral, la cual cayó a 62,8%, el nivel más bajo desde 1970.
Si la caída en la tasa de participación es por falta de trabajos, la FED debería continuar una política monetaria expansiva para estimular la economía en la creación de trabajos, incluso a pesar que la tasa de desempleo caiga por debajo de 6,5% (el objetivo preliminar para que la FED empiece a aumentar las tasas de interés).
No obstante, si la caída en la tasa de participación laboral es causada por la salida permanente de personas que participan en el mercado laboral, y por ende hay menor capacidad de reserva, la FED se verá obligada a aumentar las tasas de interés antes de lo provisto.