Por: Fernando de Andreis
Lo que hoy está en juego en nuestro país es el valor y respeto por la democracia. Como bien expresó Mauricio Macri en su conferencia de prensa, “no hay democracia sin libertad de expresión, y no hay libertad de expresión sin libertad de prensa”. Paradójicamente, lo que busca el Gobierno nacional es lo contrario: callar las voces de los medios independientes que tengan una visión distinta a ellos.
Es que según su concepción, haber ganado las últimas elecciones, les da el poder absoluto y la impunidad de hacer lo que quieran sin necesidad de respetar la Constitución, las instituciones ni la propia libertad de prensa. Pero tenemos que entender que cuando un gobierno concibe de esta manera la democracia, su esencia se pierde, y pasamos a formar parte de un autoritarismo, donde sólo se puede opinar de una única manera.
Afortunadamente, tenemos una Constitución que es muy clara al respecto y defiende los derechos de los ciudadanos, sobre todo la libertad de expresión. Lo que es lamentable es que quienes hoy gobiernan la nación no la respeten y quieran “ir por todo”. Ya fueron por la Justicia, ahora buscan controlar también los medios de comunicación.
Siempre y cuando se respete la ley, cada uno es libre de difundir sus ideas, sin ningún tipo de restricción. Entendemos que la libertad a la hora de expresarnos es un pilar central de cualquier sociedad. La diversidad de ideas, el diálogo y el respeto por el que piensa distinto, son valores fundamentales para que podamos vivir en paz.
Para proteger estas libertades que hoy el Gobierno nacional busca avasallar es que el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires firmó un decreto de necesidad y urgencia que irá a la Legislatura en los próximos días. Esperemos contar con el apoyo de todos los bloques que integran la Legislatura para aprobar este proyecto, que vela por la defensa de la democracia. Todos los políticos y funcionarios públicos tenemos la obligación de hacer respetar la Constitución.