Por: José "Pepe" Scioli
El avance del delito y el crimen organizado en nuestro país ha convertido a Mar del Plata y las ciudades aledañas en un lugar propicio para el narcotráfico y el incremento del consumo de drogas.
Por un lado, porque tiene un puerto carente de sistemas de seguridad avanzados que controlen de forma exhaustiva lo que ingresa y lo que egresa. Por otro lado, porque es la ciudad con mayor desocupación de la Argentina, lo cual afecta en gran medida a los jóvenes.
Desde nuestro espacio hemos presentado cinco proyectos de ley en el Congreso para enfrentar este flagelo, pero el gobierno nacional se ha negado sistemáticamente a tratarlos. Ellos son los proyectos de radarización del espacio aéreo, derribo de narcoaviones, atención al adicto, colocación de scanners y la creación de la Agencia Federal Antidrogas.
Difícilmente Mar del Plata logre reducir los índices de inseguridad hasta tanto las fuerzas federales intervengan y se le dé un combate frontal a la droga.
Teniendo en cuenta esta realidad, hemos avanzado en propuestas que trabajen de manera efectiva sobre los efectos de esta problemática, diseñando el Programa Municipal contra las drogas, una herramienta que, a pesar del complejo escenario nacional, nos permitiría trabajar desde lo local, informando a la sociedad en torno a las problemáticas del consumo y acompañando a los adictos en su proceso de recuperación.
El objetivo es facilitar herramientas para que las personas puedan reducir los riesgos sobre su salud, prevenir su consumo o sus efectos negativos, en función de una decisión responsable basada en un mayor conocimiento.
Con ese fin, el plan incluye la creación de una Secretaría de Prevención, que reemplace la actual la dirección existente en el organigrama municipal, y conformar una comisión con determinadas áreas sociales de la comuna y organizaciones no gubernamentales especializadas en la temática.
El programa apunta a la jerarquización de delegaciones municipales y salas de primeros auxilios, capacitando a su personal en la temática, y la creación de hospitales de día, supervisados y capacitados por los organismos como la SADA, Sedronar y ONG especializadas en la temática.
Entre otros objetivos, incluye el de facilitar el conocimiento respecto a fenómenos físicos, psicológicos y sociales relacionados con el consumo de drogas, los efectos que producen en el organismo, los riesgos asociados al consumo de diferentes sustancias y mezclas simultaneas y conductas de riesgo asociadas a la adicción.
El Hospital de Día Municipal será un dispositivo para el tratamiento y la rehabilitación ambulatoria de personas adictas. Además, servirá como una alternativa a la hospitalización cerrada, favoreciendo la continuidad de cuidados de la persona en el ámbito comunitario, reduciendo costos e incorporando familiares al proceso terapéutico.
En otro orden, el programa incluye la creación de un área de incentivación ante el ocio, que genere actividades en horarios nocturnos con el idioma de los jóvenes. Y, por último, promueve la puesta en marcha de un 0800, similar al Fonodroga, con atención directa y personalizada.
Somos conscientes de que todas estas herramientas actúan sobre los efectos de esta problemática y no detienen el avance de este flagelo. Pero estamos convencidos de que es un comienzo. Creemos que desde lo local, trabajando desde el Senado provincial, se pueden hacer muchísimas cosas para mejorar la vida de los marplatenses y vecinos de otras ciudades otorgándoles a las familias las herramientas necesarias para contener a sus hijos, afectados por una realidad que ya nadie puede ocultar.