Axel Kicillof malogró el poco tiempo que tenía para intentar un acuerdo con el fondo NML Capital, pidiendo a Griesa que reinstalara el “stay” (análogo a una medida cautelar). ¿Por qué habría de reinstalar esa “medida suspensiva” si estuvo en vigencia por casi dos años y la había levantado él mismo el pasado martes? Una vez más nos encontramos con que el gobierno argentino parece no tener Plan B. Pero también hay que destacar el pobre papel de la oposición que tampoco parece entender la gravedad de la cuestión. Entraron en el juego del oficialismo de buscar consenso multipartidario tanto en diputados como senadores. Y una vez más, dejan ver su muy mala cintura política.
¿Y ahora qué? Economía acaba de anunciar que giró US$ 539 millones del bono Discount, pero faltan los 1330 millones que exige NML Capital. ¿Cuál es el marco para negociar que está pidiendo el gobierno? Le quedan 72 horas. Lo que tienen que estar hablando con los Fondos Buitres es la manera en la que les van a pagar. Y por más que el gobierno intente pagar con algo que no sea efectivo, dudo que los fondos acepten otra cosa. No olvidemos que la Justicia estadounidense también avaló la posibilidad de “discovery” (o búsqueda) de activos argentinos en el exterior para embargar. Con lo cual, el fallo está más en vigencia que nunca. Pedir la extensión de la cautelar que ha caducado la semana pasada era también obviar la sentencia de “discovery”.
¿Qué margen de negociación tiene la Argentina con NML Capital? Ninguno. Cero. ¿Por qué? Porque ellos saben que si Argentina no les paga el lunes, entra en default. Y también sabe que Argentina tiene la plata para pagar. ¿Por qué va a dar el brazo a torcer si ya nos tiene contra las cuerdas? Yo ganaron, tiene sentencia y además sabe que cualquier dólar del Estado argentino que ingrese en los EEUU será embargado a su favor.
No podemos continuar aferrándonos a ilusiones sin ningún tipo de sustento, como aquella por la cual la Corte de los EEUU pediría opinión al Procurador General otorgándonos un tiempo muy valioso. Si Argentina no paga los cupones más los 1330 millones el día lunes, entra en default técnico.
Tenemos que terminar con el discurso de victimización que reza “queremos pagar pero no nos dejan”. ¡Qué tragedia! El mundo se ha puesto en nuestra contra. Más que pedir cosas impracticables, el gobierno debe detallar cómo hará el pago sin más rodeos. De más está decir que ya tiene que pensar también en cómo hacer frente a los juicios del resto de los holdouts. Ya vienen 2700 millones de acreedores italianos también. Y el resto de los “buitres” ya se están poniendo en la fila para cobrar. También habrá que pagarles. Parece que en el gobierno todavía no lo terminan de asimilar.
Vayamos pensando que el BCRA tendrá 1500 millones de dólares menos en sus reservas la semana que viene. Digo esto porque asumo que el gobierno se tragará sus palabras una vez más (“no vamos a devaluar”, “no vamos a pagarle ni un peso a Repsol”), y hará efectivo el pago para no entrar en default. Sinceramente, espero que sea eso lo que haga y que no nos sorprenda ingratamente.