Por: Roberto Basualdo
Esta semana participé del foro Argentina Agroindustrial 2015, de la feria “Alimenta San Luis”, que se realizó junto a dirigentes rurales con el objetivo de diseñar los lineamientos generales de la política regional a corto, mediano y largo plazo.
Se trató del debate Argentina Agroindustrial Post 2015, que fue inaugurado por el gobernador de San Luis, Claudio Poggi, y que en su instancia política participé junto al senador Adolfo Rodríguez Saá; el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, Rubén Ferrero; el vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina, Daniel Pellegrina; y el presidente de CONINAGRO, Carlos Garetto.
Rodríguez Saá mencionó en su exposición la falta de liderazgo en el país. A esto yo le agregué la falta de sentido común. Es que a quién se le ocurre decir –señores, nos vamos a pelear con el mundo-, si nosotros necesitamos exportar… Los dólares los vamos a sacar de la exportación, del campo y la producción. A mí cuando me dicen -vos querés un tipo de cambio alto-, yo les digo que no, que yo quiero un tipo de cambio competitivo. Y en esto reclamo sentido común.
Hoy en el país se está apostando a la parte financiera y no a la producción. Si alguien tiene un ahorro, en lugar de invertir en una nueva línea de producción lo va a invertir en un bono, por el que no tiene que pagar impuestos y le da rentabilidad. Con esto se está secando la plaza financiera. Necesitamos apostar a la producción.
En este país parece que los enemigos son los que producen. Hace un tiempo, este mismo gobierno presentó un proyecto de ley que fue aprobado por unanimidad en diputados, que establecía que todo lo que se invierta en bienes de capital se podía descontar de forma anticipada del impuesto a las ganancias, que era algo lógico. Pero cuando pasó al Senado quedó durmiendo por el costo fiscal. Nosotros, con Adolfo Rodríguez Saá, y otros senadores más, lo reformamos y le pusimos un costo fiscal determinado que es lo más competitivo. Sin embargo, la iniciativa no prosperó.
Ahora se dice que estamos cuidando precios, ¿cuántos precios se cuidan? Veamos, si en un supermercado hay 20 mil productos, los precios cuidados son cerca del 1%, que además son mal cuidados. Entonces, ¿por qué no cuidamos los 20 mil artículos que están en el supermercado apostándole a la producción, si impulsar la oferta y la demanda es lo mejor que podemos hacer? Entonces queda claro que lo que hace falta es sentido común y confianza para que vengan las inversiones.