Por: Alberto Valdez
A pocos días de las elecciones legislativas son pocas las dudas que surgen en torno al veredicto de las urnas. En primer lugar la gran obsesión de oficialistas y opositores pasa por el número nacional que obtenga el Frente para la Victoria y sus aliados, sobre todo porque el argumento elegido por la Casa Rosada para minimizar la derrota en las PASO fue que los K igual eran la primera fuerza política.
Es probable que el domingo el kirchnerismo pierda a nivel nacional un par de puntos en relación a lo que cosechó en agosto. Mucho va a depender de lo que obtenga la lista que encabeza Martín Insaurralde en la provincia de Buenos Aires. Hay una relación entre el resultado bonaerense y a nivel país. A diferencia de las primarias en estos comicios no se computan los votos en blancos, con lo cual el FpV puede sacar menos votos y un mayor porcentaje. En las PASO llegó al 29,6% y ahora seguramente superará el 31%.
El otro enigma estratégico que se va a definir en el escenario bonaerense es la brecha que le saque Sergio Massa a su rival y si rompe el techo psicológico del 40%. Los últimos números indican que podría ir más allá de esa cifra y sacarle a intendente de Lomas de Zamora una diferencia mayor a los 10 puntos, sobre todo si ratifica su victoria en la Primera Sección Electoral por casi 20 puntos esta vez y gana en La Plata, Bahía Blanca y empareja la mala performance de agosto en Mar del Plata.
Otra contienda que ha generado gran expectativa es la pelea por el tercer senador en la Ciudad de Buenos Aires. Como el PRO ganará con comodidad en esta categoría Gabriela Michetti y Diego Santilli ingresarán al Senado mientras que Fernando Solanas parece haberle sacado una leve luz de ventaja a Daniel Filmus pero aún no está dicha la última palabra. Algo similar se percibe en la competencia por diputados nacionales donde Sergio Bergman y Elisa Carrió pelean voto a voto.
En Mendoza se percibe mucha previsibilidad. Julio Cobos ganará con gran contundencia con chances de llegar al 50% de los votos y dejará a Alejandro Abraham al borde de una de las peores derrotas que haya sufrido el peronismo en esa provincia. El trotskista Nicolás Del Caño puede ser la gran revelación si logra quedarse con una banca de diputado. En Córdoba nadie duda del triunfo de Juan Schiaretti ni del segundo lugar del radical Oscar Aguad pero importa y mucho si la brecha final supera los 10 puntos. También hay expectativa por el tercer lugar. Se cree que Héctor Baldassi, por el PRO, se impondría a la kirchnerista Carolina Scotto.
Otro favorito es Hermes Binner en Santa Fe, quien apunta a aumentar el volumen de votos que logró el 11 de agosto para darle un espaldarazo a su proyecto presidencial, mientras que Miguel Del Sel sostiene que va a superar el 25% de los votos que le pronostican los sondeos. Se ve más cerca de un 30% porque tiene buena intención de voto en los lugares adonde no llegan los encuestadores: las villas de emergencia y las localidades con menos de 10.000 habitantes. Este escenario podría derivar un serio revés para un Jorge Obeid, quien no disimula su incomodidad por su alianza K con La Cámpora.
Uno de los pocos kirchneristas que saldrán fortalecidos será el gobernador de Entre Ríos, Sergio Uribarri. Su candidato, el senador Pedro Gustavino, espera sacar más votos que en agosto aunque no lo favorece el escenario de polarización que se percibe con Alfredo De Angeli, aliado al macrismo, que ya ha dejado al radical Atilio Benedetti como tercero cómodo. Los otros oficialistas que se preparan para triunfos personales son el rionegrino Miguel Ángel Pichetto, quien está cerca del 45%, y el gobernador salteño, Juan Manuel Urtubey, ya que su hermano Rodolfo puede aumentar la ventaja obtenida en las PASO.
En Santa Cruz el radical Eduardo Costa se prepara para consolidar su triunfo en las PASO y podría superar el 50% a 20 puntos del candidato de La Cámpora, Mauricio Gómez Bull, aunque el gran derrotado será el gobernador Daniel Peralta ya que su candidata Nieves Beroiza apenas llegaría al 13%. Mientras, el petrolero Guillermo Pereyra se encamina a un triunfo categórico en Neuquén que golpearía a su rival dentro del MPN, el gobernador Jorge Sapag. Lejos, compiten por el tercer senador el kirchnerista Marcelo Fuentes y el radical Marcelo Inaudi. En Chubut, a su vez, Mario Das Neves le ganará nuevamente con comodidad al ministro de Agricultura, Norberto Yahuar.
En el norte del país hay más enigmas o escenarios de paridad. En Jujuy el radical Mario Fiad pelea palmo a palmo con el candidato del gobernador Eduardo Fellner, Héctor Téntor. Se viene un final de bandera verde donde la oposición se hace fuerte en la capital provincial y el PJ descuenta en el interior. Algo similar se percibe en Catamarca donde Eduardo Brizuela del Moral se impone ajustadamente ante Néstor Tomassi, el delfín de la gobernadora Lucia Corpacci. También otro dirigente de la UCR como Luís Martínez puede repetir su performance en las PASO y ganarle a Teresa Madera, la candidata del gobernador riojano Luís Beder Herrera.
Pese a que el senador radical José Cano ha logrado una fuerte levantada desde las primarias (pasó del 27% a un 30% que le dan las últimas encuestas) no podrá revertir la diferencia que le lleva Juan Manzur, el candidato que bendijo el gobernador José Alperovich, quien de todas formas quedará herido y sin poder suficiente para imponer un candidato para la sucesión. Cano achicará la brecha con una muy buena performance electoral y quedará posicionado para pelear por la Gobernación en 2015.
En Misiones crece la preocupación del gobernador Maurice Closs ya que la lista de diputados nacionales que respalda se impone por menos margen que en las PASO. Alex Ziegler logró 36,8% en agosto y ahora las encuestas le anticipan un 32% contra un 27% de la nómina que lidera el peronista disidente Ramón Puerta. Otro mandatario provincial nervioso es Jorge Capitanich, porque su candidato a senador Eduardo Aguilar no logra sacarle ventaja al radical Ángel Rozas. Otra competencia con final de bandera verde.
Todo parece indicar que no sólo la fuerza política de la presidenta Cristina Fernández sufrirá derrotas el domingo sino que además varios gobernadores del PJ saldrán debilitados por la pésima calidad de sus gestiones. Al ser pocos los mandatarios justicialistas con chances de surgir con más poder, tiende a desvanecerse el escenario que anticipaban en el peronismo sobre una liga de gobernadores dispuesta a presionar a CFK para que haga el ajuste y trabaje para allanarle el camino a Daniel Scioli.